Por Elvin Sandoval
Estudios de organizaciones no gubernamentales denuncian que para la cosecha del café de este año se emplea a unos 20.000 niños de entre seis y 17 años.
Es el caso de la pequeña Iris, de doce años, y que tuvo que dejar sus estudios y trasladarse a las montañas junto a sus padres para iniciar su trabajo en el corte del café.
Iris dice que ya lleva cuatro años consecutivos haciendo este trabajo y que le pagan unos dos dólares por cada dos kilos de café que recoge a lo largo de una jornada de ocho horas.
Según Iris, hace este trabajo para ayudar a sus padres a comprar algunas cosas para ella, sobre todo en la época de navidad.
“Yo corto solo para ayudarles a mis padres, corto y el dinero se los doy a ellos, yo sólo agarro a veces cuando compro algo o ocupo una cosa”, dijo la menor mientras con sus finos dedos arrancaba el grano de la planta.
Nancy Zuñiga, encargada del programa infantil de la Organización Plan Internacional, asegura que los niños sufren explotación y abusos.
“Las niñas son abusadas en las fincas donde se quedan sin ninguna seguridad aunque sus papás y sus mamás se encuentran ahí. También hay mucho embarazo temprano en la población que corta el grano y hasta estupro”, afirmó Zuñiga.
Sin embargo, Mario Segura, uno de los productores de café, sostiene que los menores están en las fincas porque acompañan a sus padres y realizan labores menores como llevar el almuerzo de sus progenitores y lo hacen cuando ya han terminado su año escolar.
Según cifras de la Secretaria del Trabajo y Previsión Social, el último estudio de la encuesta de hogares revela que unos 412.000 niños realizan las peores formas de trabajo infantil en rubros como agricultura, pesca, casa y silvicultura.
El Gerente del Instituto Hondureño del Café, Víctor Hugo Molina, asegura que erradicar el trabajo infantil en el corte del café es una tarea difícil debido a las necesidades económicas que tienen los habitantes de la zona cafetera.
Honduras, según las últimas cifras de la Organización Internacional del Café, ocupa el primer lugar a nivel centroamericano en exportación de café, el tercero de Latinoamérica y el sexto a nivel mundial.
Para la cosecha 2011-2012 que comenzó el 1 de octubre y que dura unos cinco meses, los productores hondureños esperan cortar con la mano de obra de niños y adultos unos seis millones de sacos de café de 46 kilos, que le dejarán en divisas más de 1.200 millones de dólares.