(CNN) – La cifra de muertos de los enfrentamientos entre las fuerzas del gobierno sirio y los civiles siguió en aumento el domingo, un día después de que el Consejo de Seguridad de la Naciones Unidas no pudiera aprobar el plan que buscaba detener la violencia.
La Liga Árabe dijo el domingo que seguirá trabajando con el gobierno sirio y con la oposición para detener las muertes a pesar de la votación del Consejo de Seguridad, y le pidió al gobierno “prestar atención a las demandas del pueblo”.
Al menos 43 personas, incluyendo cinco niños, fueron asesinados por las fuerzas de seguridad el domingo, según el grupo Comités de Coordinación Local de Siria, una red de activistas de oposición.
El Observatorio Sirio de Derechos humanos dijo que un niño de 14 años murió cuando las fuerzas de seguridad dispararon para dispersar una manifestación en las afueras de Damasco.
Comités de Coordinación Local anunció planes de una huelga civil de dos días empezando el domingo como forma de presionar al gobierno del presidente Bashar al-Assad.
El secretario general de la Liga Árabe Nabil el-Araby insistió en que a pesar de los desarrollos en el Consejo de Seguridad, la Liga Árabe y la comunidad internacional seguirán buscando una solución a la crisis, según dijo un funcionario de la Liga que no dio su nombre porque no está autorizado a hablar con los medios.
“La Liga Árabe busca evitar la intervención militar en Siria y sigue abogando por una solución árabe a la crisis siria”, dijo el funcionario citando a el-Araby.
La Liga Árabe suspendió su misión en Siria hace una semana debido al recrudecimiento de la violencia, con cientos de muertos en combates.
El sábado, Rusia y China usaron su poder de veto en el Consejo de Seguridad para no aprobar un borrador de una resolución que le hubiera exigido a Al-Assad dejar de matar y responder a los llamados que buscaban encontrar una solución a la crisis de 11 meses en Siria.
Los otros 13 miembros del Consejo de Seguridad votaron a favor de la resolución.
“Lo que pasó el viernes en las Naciones Unidas es una farsa”, dijo la secretaria de estado de Estados Unidos Hillary Clinton el domingo, afirmando que el veto dejó al mundo “con un Consejo de Seguridad neutralizado”.
Clinton dijo que la comunidad internacional tiene que “redoblar los esfuerzos por fuera de las Naciones Unidas con los aliados que apoyan el derecho del pueblo sirio a un mejor futuro. Debemos incrementar la presión diplomática sobre el régimen de al-Assad y trabajar para convencer a aquellos que rodean al presidente de que deben irse, y de que tiene que haber un reconocimiento de eso y un nuevo inicio para tratar de formar un gobierno que represente a todo el pueblo de Siria”.
Los embajadores de Rusia y China dijeron que apoyaban el fin de la violencia pero no estuvieron de acuerdo con el texto de la resolución, que dijeron habría complicado el asunto y hubiera enviado señales conflictivas a ambas partes.
El ministro de Exteriores ruso Sergey Lavrov tiene programado visitar Damasco el martes para reunirse con al-Assad, según dijo el embajador ruso Vitaly Churkin.
Embajadores de tres otros miembros permanentes del Consejo de Seguridad –Estados Unidos, Francia y Reino Unido- dijeron que estaban furiosos con Rusia y China por no aprobar el fin de la violencia que ha consumido a Siria.
La embajadora estadounidense Susan Rice le dijo a CNN que Rusia y China “tendrán cualquier futuro derramamiento de sangre en sus manos” y el embajador francés Gerard Araud dijo que Rusia y China se han aliado con un régimen que masacra a su pueblo.
En días pasados, más de 300 civiles han muerto y cientos han sido heridos en Homs, al norte de Damasco. La oposición culpa al gobierno por los ataques.
Edificios residenciales y casas han sido bombardeados en lo que el Consejo Nacional Sirio, órgano de oposición, ha llamado una “masacre”.
CNN no puede confirmar de manera independiente los reportes de Siria debido a que el gobierno ha restringido el acceso de los periodistas al país.
El embajador de de Siria ante la ONU Bashar Jaafari dijo que la crisis ha sido fabricada y que hay una campaña mediática para hacer quedar mal al gobierno sirio, que ha culpado a “grupos armados terroristas” por la violencia.
Refiriéndose a las muertes en Homs, Jaafari pregunto: “¿Existe alguien que crea que el gobierno comete masacres en una ciudad cualquiera en un día en que el Consejo de Seguridad tiene una reunión para examinar la situación en ese país? ¿Por qué una entidad se pondría a sí misma en esa posición?