(CNN) — El Ejército de Estados Unidos trabajó durante casi dos años para equipar a sus soldados con teléfonos inteligentes, pero se encontró con un obstáculo para esta mejora tecnológica que podría resultar familiar para cualquier persona que haya intentado manejar su teléfono con pantalla táctil en invierno: Los smartphones con touchscreen y los guantes no funcionan bien juntos.
En lugar de invertir el dinero del Gobierno para desarrollar un nuevo tipo de guantes, el Ejército estadounidense fue de compras. Al igual que con su ‘flotilla’ de teléfonos inteligentes, buscó a alguien que ya solucionó el problema de la compatibilidad.
Todavía no son un objeto de moda en el mercado en general, pero de hecho, varias empresas venden guantes que permiten al usuario operar una pantalla táctil sin tener que quitárselos. Y mientras más personas descubren las limitantes smartphones en un día muy frío, este tipo de guantes podría empezar a ser más popular.
El Ejército y la Fuerza Aérea de Estados Unidos llegaron a una marca en particular: Agloves. La casi desconocida empresa de Colorado compitió contra otras importantes, como North Face, y media docena más de novatos como Dots, Echo Touch, Freehands, Power Stretch, Tavo y TouchTec.
Sin embargo, Agloves tiene el apoyo del Ejército estadounidense, para quienes un guante de mala calidad no significa una llamada perdida, sino que podría significar la pérdida de una vida.
La base militar del Ejército estadounidense en Fort Bliss, Texas, probó varios modelos de guantes que prometían compatibilidad con los teléfonos inteligentes como parte de su programa móvil. Los evaluadores se inclinaron por Agloves, y el Ejército de Estados Unidos envió muchos pares a sus soldados en el extranjero.
“Estas tecnologías que surgen de pequeñas compañías literalmente cambian el juego”, dice en entrevista telefónica Michael McCarthy, director de Tecnología del Ejército estadounidense.
Los guantes de invierno fueron descritos en el blog Mashable, un socio de contenidos de CNN, como un accesorio que no está particularmente a la moda. Para Jennifer Spencer, la fundadora y presidente de 52 años de Algoves, la moda nunca fue una cuestión.
“Nuestros competidores están en la industria de la moda”, dice Spencer vía telefónica. “Queremos que nos vean primero y principalmente como un accesorio inalámbrico”.
Por esa razón, no los encontrarás en las tiendas departamentales como Macy’s o Nordstrom. En lugar de eso, los guantes Agloves se venden en tiendas especialistas como Best Buy, Verizon Wireless, Sprint y en las tiendas U.S. Cellular, en donde casi la mitad de su inventario se vendió la última temporada invernal. También pueden comprarse en Amazon.com y en la página web de Agloves.
Las pantallas táctiles funcionan con la electricidad natural que produce nuestro cuerpo, principalmente a través del sudor. Agloves funciona jalando la bioelectricidad de la muñeca y las palmas del usuario, y la transfiere a los dedos del guante.
Agloves aumentará su producción para la siguiente temporada invernal y añadirá un par de estilos nuevos, dice Spencer. Los modelos actuales cuestan entre 18 y 24 dólares por par.