(CNN) — El grupo Al-Qaeda en la Península Árabe se adjudicó la responsabilidad de una serie de ataques contra las fuerzas de seguridad de Yemen ocurridos en días recientes, y en los que murieron más de 180 oficiales.
El grupo militante emitió un comunicado –del cual CNN recibió una copia el miércoles– describiendo los ataques.
“El mujadín llevó a cabo una serie de ataques contras las fuerzas del gobierno en Sanaa, en las afueras de la ciudad de Zunjubar, en la provincia de Abyan”, según el comunicado.
Los ataques fueron considerados los más sangrientos contras las fuerzas yemeníes en días recientes, y en los que se cree que murieron cerca de 200 oficiales en tres provincias.
El comunicado informó que combatientes militares lograron apoderarse de un gran número de armas, incluida artillería pesada y tanques.
Una delegación del Comité Militar en Yemen, la máxima autoridad de seguridad del país, llegó Abyan el miércoles para investigar cómo fue posible que Al-Qaeda pudiera llevar a cabo esos ataques en la provincia.
“Le dijimos al comité que fuimos engañados por nuestros superiores y que el gobierno no nos ayudó mientras éramos rodeados y asesinados”, dijo uno de los soldados heridos. “Nos dejaron morir y a merced de los militantes terroristas”.
Los ataques en Abyan, que comenzaron el sábado, mataron a 187 soldados e hirieron a al menos otros 135, dijeron dos oficiales de seguridad de esa provincia a CNN.
Al-Qaeda también es responsable de la explosión dentro de las instalaciones de la fuerza aérea en Sanaa, añade el comunicado.
“Los muyaidines detonaron un avión militar de la Fuerza Aérea Yemení en la base militar Al-Dailamy, la cual llevaba armas de Adan a Hadramout. La detonación se hizo luego de que los militantes se infiltraron en la base y colocaron un explosivo dentro del avión”, según el comunicado.
El presidente Abdurabu Hadi, se comprometió el martes a pelear contra Al-Qaeda y retomar el poder en áreas como Abyan, que están bajo el control de militantes terroristas.
“Esperamos encontrar obstáculos, pero el presidente hará todo lo que esté en su poder para arrancar de raíz el terror de los militantes (de Al-Qaeda) del país. Es la promesa que hizo al pueblo”, aseguró Yahya al-Arassi, vocero del presidente.