El primer debate entre los cuatro aspirantes a la presidencia de México se centró en las críticas y acusaciones mutuas. Los candidatos usaron los espacios designados para plantear sus propuestas para cuestionarse, descalificarse e invitarse a hablar con la verdad o a “revisar la tarea”.
La abanderada del Partido Acción Nacional (PAN), Josefina Vázquez Mota, inició el debate diciendo que no utilizaría “adjetivos ni injurias”, aunque aprovechó prácticamente todas sus réplicas para señalar lo que, en su opinión, respondía a errores del exgobernador del Estado de México, Enrique Peña Nieto. Mientras tanto, el candidato del Movimiento Progresista, Andrés Manuel López Obrador, señaló que el priista había gastado 691 millones de pesos tan sólo en una cadena televisiva (Televisa) para la promoción de su imagen durante el primer año de su gobierno en el Estado de México.
Por primera vez desde que inició la campaña electoral, Peña Nieto se defendió de lo que consideró “ataques” en su contra. Dijo que no tenía tiempo suficiente para responder los señalamientos de “quienes al parecer se pusieron de acuerdo” en referencia a Vázquez Mota y López Obrador, y destacó que ellos tenían “el doble de tiempo” para atacarlo.