Atenas (CNN) — El presidente griego intentará este lunes una vez más que los líderes políticos formen un nuevo gobierno para el accidentado país, pero mientras el reloj avanza, el jefe del segundo partido más grande de la nación dijo que no asistiría al encuentro.
Alexis Tsipras dijo que estaba dispuesto a reunirse cara a cara con el presidente, Karolos Papoulias, o con todos los líderes de los partidos, excepto con el de Amanecer Dorado, grupo de extrema derecha, pero rechazó ser partícipe de “discusiones selectivas”.
Syriza, su grupo de izquierda radical, quedó en segundo lugar en las elecciones parlamentarias del 6 de mayo, y desde ese momento las encuestas de opinión señalan que quedaría en primer lugar si los políticos tuvieran que convocar a nuevas elecciones debido a su imposibilidad de formar un gobierno.
El país golpeado por la deuda tiene hasta el jueves para conseguir formar un gobierno o convocar a nuevas elecciones. Si Grecia se queda sin gobierno durante tanto tiempo, podría quedarse sin dinero para pagar sus deudas y salir del euro, moneda utilizada por 17 países de la Unión Europea.
“Si no hay gobierno antes de junio, que es cuando llega el próximo abono (de dinero prestado) de la Unión Europea y el Fondo Monetario Internacional, calculamos que Grecia se quedará sin dinero en algún punto entre finales de junio y principios de julio, momento en el que parecería inevitable el regreso al dracma como moneda”, publicó Bank of America / Merrill Lynch en un informe dado a conocer el viernes.
El partido Syriza, el cual es comandado por Tsipras, ha hecho campaña en contra de las duras restricciones en el gasto de gobierno, las cuales fueron impuestas por prestamistas internacionales a cambio de su respaldo financiero.
Tsipras dijo el domingo que otros partidos querían que Syriza fuera “cómplice”, y añadió: “No podemos hacer eso”. Papoulias había convocado a los líderes de los tres principales partidos, una semana después de unas elecciones no concluyentes y tras tres intentos fallidos para formar un gobierno.
Papoulias dijo que tenía la esperanza de poder ayudar a formar un gobierno de unidad, y agregó que “en Grecia las cosas están muy difíciles”, pero las cosas se veían aún más difíciles después del encuentro del domingo.
Después de la reunión, Tsipras dio a entender que los otros dos grandes partidos, Nueva Democracia y PASOK, iban a formar una coalición con un grupo más pequeño, la Izquierda Democrática.
Pero Izquierda Democrática emitió un comunicado en el que califica los comentarios de Tsipras como “una desgracia”, y lo acusa de mentir y difamar al partido más pequeño.
Las conversaciones con Papoulia se llevaron a cabo una semana después de las elecciones en las que furiosos electores castigaron a los principales partidos dando sus votos a una serie de partidos marginales.
El líder de Izquierda Democrática, Fotis Kouvelis, sostuvo una reunión con Papoulias la noche del domingo. Lo mismo Nikolaos Michaloliakos, jefe del partido de extrema derecha Amanecer Dorado.
Michaloliakos salió del encuentro y dijo que cualquier nuevo gobierno necesitaría de un ministro respetado a nivel internacional, con el suficiente peso como para rechazar el paquete de rescate que acordó el gobierno anterior, y calificó el acuerdo como “un crimen contra nuestro país”.
Tsipras consideró que otros partidos podrían formar un gobierno sin su apoyo. “Los tres partidos tienen en su conjunto 168 escaños. Pueden seguir adelante con eso. Nos están presionando para participar, y esa es una solicitud irracional y sin precedentes. Quieren que demos un falso sentido de legitimidad”, dio Tsipras.
Pero Izquierda Democrática dijo que no había acordado apoyar una coalición sin Syriza, sobre Tsipra dijo: “Su evidente incapacidad para justificar su postura no debería llevarlo a calumniar y mentir. Esto es un acto político no ético por su parte”.
Evangelos Venizelos, líder del partido socialista PASOK, dijo después de la reunión que su partido haría todo lo posible para formar un gobierno de unidad nacional, pero que en caso de que fuera necesario convocar a nuevas elecciones ellos se encontraban listos.
Antonis Samaras, líder del partido de centroderecha Nueva Democracia, dijo antes de la reunión del domingo que los electores habían llamado a la colaboración, el cambio y a mantenerse dentro de la eurozona, el grupo de 17 países europeos que emplea el euro como misma moneda.
El Partido Comunista convocó a nuevas elecciones y dijo que no participará en un gobierno de coalición. Cuatro de cada cinco electores dijeron que en una nueva elección votarían de la misma manera, según una encuesta publicada el sábado por el diario Kathimerini.
“Votaría lo mismo”
En otra encuesta publicada el domingo por el periódico Vima, siete de cada 10 personas dijeron que querían que los partidos formaran un gobierno de coalición.
Syriza se posicionaría en primer lugar si se celebraran nuevas elecciones, señala la encuesta de Vima, después de quedar en segundo lugar hace una semana, sólo detrás de Nueva Democracia, con un 16.8% de los votos. Pero los resultados todavía darían pie a un Parlamento profundamente dividido, señala la encuesta, sin que ningún partido consiga más del 21% de los votos.
En la misma encuesta, seis de cada 10 electores dijeron que los planes de Syriza no eran realistas. El líder del partido, Tsipras, pronunció la semana pasada un discurso radical en contra de la austeridad.
Syriza se opone a los términos en que está planteado el rescate acordado con la Unión Europea, el Banco Central Europeo y el Fondo Monetario Internacional. Los prestamistas del país han dicho que si Grecia no cumple con los términos del rescate financiero, detendrán los pagos.
Una profunda incertidumbre rodea la situación política en Grecia después de que en las elecciones de hace una semana un gran número de electores respaldaron a partidos que se oponen al acuerdo de rescate financiero del país.
En los términos del rescate, son necesarias duras medidas de austeridad; el rescate fue acordado por el saliente gobierno de coalición, encabezado por PASOK y Nueva Democracia.
Siete partidos obtuvieron escaños en el Parlamento, pero ninguno obtuvo más del 19% de los votos, lo cual llevó a la actual tormenta política. Para el resto de la eurozona, los riesgos son potencialmente enormes. Existe la inquietud de que la falta de liderazgo pudiera poner en peligro el acuerdo de rescate de Grecia. Eso podría llevar a una turbulenta moratoria por parte de Grecia, la cual obligaría al país a salir de la eurozona.
Un impago por parte de Grecia también podría arrastrar a otros gobiernos que están en problemas, como España y Portugal. La economía de la eurozona es frágil, y cualquier impacto financiero podría sumir a la región en una profunda recesión, acontecimiento que se esparciría por todo el mundo.
Antonia Mortensen, de CNN, y la periodista Elinda Labropoulou contribuyeron con este reporte.