(CNNMéxico) — El gobierno de El Salvador solicitó en las últimas horas a México información genética de los restos de 49 cuerpos encontrados en Nuevo León el domingo pasado para comprobar si existen ciudadanos salvadoreños entre los fallecidos, informó Notimex.
El viceministro de los salvadoreños en el exterior, Juan José García, indicó que pidieron al gobierno de México la información de ADN de los cuerpos encontrados para ser cotejados con el banco genético de El Salvador.
El funcionario llamó a las familias salvadoreñas a que en caso de tener parientes que hayan viajado por esas fechas hacia México se acerquen a la Cancillería y aporten los datos necesarios para poder identificar a posibles víctimas.
El gobierno del estado de Nuevo León, norte de México, informó el miércoles que mandó oficios a todas las entidades para conseguir el ADN de familias que tengan desaparecidos para poder comprobarlos con las muestras que se han tomado a los restos de los 49 cuerpos abandonados en Cadereyta.
El portavoz del Consejo de Seguridad de Nuevo León, Jorge Domene Zambrano, dijo que realizaron esta petición para que los parientes de los desaparecidos se presenten en el Servicio Médico Forense (Semefo) y realizar la comparación.
El ADN será la única manera de identificar a los 49 cuerpos abandonados el domingo pasado en el kilómetro 47 de la carretera libre Monterrey-Reynosa, debido a que los cadáveres tenían la cabeza, manos y piernas cortadas, dijo Domene Zambrano.
Las autoridades de Nuevo León integraron a la investigación un video subido a internet, que dura 6 minutos y 57 segundos, en el cual se ve a un grupo de jóvenes bajando los cuerpos de un camión.
El hallazgo de cuerpos en Cadereyta es uno de los incidentes más violentos registrados recientemente por las actividades del crimen organizado. El secretario de Gobernación, Alejandro Poiré, atribuyó el hecho a la disputa que sostienen los cárteles del Golfo y de Sinaloa —dirigido por Joaquín Guzmán— contra Los Zetas.
Más de 47.515 personas han muerto con relación al crimen organizado desde que en el 2006 el gobierno de Felipe Calderón inició una Estrategia Nacional de Seguridad basada en el combate frontal al crimen organizado.