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WASHINGTON (CNN) — Las inquietudes acerca de si la endeudada Grecia se verá obligada a retirarse de la eurozona, y lo que ello significaría para la debilitada economía europea, salta como tema principal en la agenda sabatina de la cumbre del Grupo de los Ocho (G8), organizada por el presidente de EU, Barack Obama, dijo un funcionario de alto rango.

Las conversaciones están insertas en un marco de importantísimos encuentros conjuntos en los que una serie de temas apremiantes en materia de economía y seguridad militar serán discutidos por los líderes mundiales durante un maratón diplomático de tres días de duración, el cual comenzó el viernes con la cumbre del G8 en las afueras de Washington y finalizará el domingo con una cumbre de la OTAN en Chicago.

Los líderes del G8 –constituido por Estados Unidos, Francia, Reino Unido, Alemania, Japón, Italia, Canadá y Rusia- comenzaron la cumbre el viernes en Camp David, la residencia de descanso presidencial ubicada en Maryland, con una cena de mesa redonda en la que se discutieron los problemas de seguridad en Irán, Siria, Corea del Norte y Birmania, según el funcionario, quien habló bajo condición de anonimato.

Entre los líderes hubo un amplio consenso acerca de que Corea del Norte enfrentará un mayor aislamiento si sigue con su búsqueda de un programa nuclear, y la mayoría acordó que es responsabilidad de Irán el demostrar que su programa nuclear está siendo desarrollado con fines pacíficos y no para creación de armas, dijo el funcionario.

Pero los líderes del G8, quienes se han mostrado divididos en materia de cómo responder al conflicto en Siria, coincidieron en que no se está cumpliendo con el plan de paz negociado por Kofi Annan, enviado especial de la ONU, dijo el funcionario. Rusia y China vetaron una resolución del Consejo de Seguridad que condena la violencia y pide la dimisión del presidente Bachar al Asad.

Los líderes, entre ellos el primer ministro ruso, Dmitry Medvedev, acordaron que era hora de centrarse en el presidente Bachar al Asad.

El presidente ruso, Vladimir Putin, no asistirá el encuentro del G8, lo cual hace poco probable que se presenten avances significativos en el tema de Siria o Irán. Rusia ha estado en desacuerdo con Estados Unidos y otros países del G8 sobre qué tan duras deben de ser exactamente las acciones contra Damasco y Teherán.

También se espera que las discusiones del sábado se centren en si una endeudada y económicamente debilitada Europa debe continuar por el camino de masivos recortes del déficit anunciados por la canciller alemana, Angela Merkel, o en su defecto, enfocarse más en estímulos económicos para ayudar al continente a salir de la actual crisis.

Entre las deliberaciones está el destino de la financieramente maltratada Grecia, nación que no ha podido formar un gobierno electo. Muchos analistas creen que Atenas se verá obligada dentro de poco a salir de eurozona, abandonando así la moneda del euro y posiblemente sacudiendo más la confianza económica.

De cara al inicio del G8, el destino de Grecia también fue el centro de las preocupaciones el viernes en una reunión entre Obama y el recién electo presidente francés, Francois Hollande, quien fue elegido por una plataforma que se opone a los cada vez más impopulares recortes de gasto en la eurozona

Obama dijo que él y Hollande estuvieron de acuerdo en que el asunto era de “particular importancia” para la economía mundial.

“Grecia debe permanecer en eurozona”, insistió Hollande durante su encuentro con Obama. Todos “debemos hacer lo que podamos en ese sentido”.

Se espera que entrado el fin de semana, la guerra en Afganistán domine los debates en la cumbre de la OTAN. Se tiene previsto que tanto el presidente afgano, Hamid Karzai, como el presidente paquistaní, Asif Zardari, asistan a la reunión.

Los líderes de la OTAN actualmente se encuentran estableciendo un calendario para en el 2014 retirar de Afganistán todas las tropas de combate de la alianza.

Uno de los temas clave a ser discutido en Chicago es quién pagará el costo de las fuerzas de seguridad afganas durante y después de la reducción de la OTAN. Las fuerzas de seguridad afganas deberán totalizar alrededor de 350,000 elementos para el 2015, según el analista de Seguridad Nacional de CNN, Peter Bergen. El gobierno de Karzai sólo puede cubrir una fracción del costo, el cual se tiene previsto sea de aproximadamente 4,000 millones de dólares al año después de 2014, señala Bergen.

Otro problema es el ininterrumpido bloqueo por parte de Islamabad de los suministros necesarios de la OTAN, esto en las carreteras que van Pakistán a Afganistán. Pakistán ha mantenido su espacio aéreo abierto, pero cerró sus rutas terrestres tras la muerte de más dos decenas de soldados paquistaníes a manos de las fuerzas de la OTAN en un puesto militar en la frontera entre Afganistán y Pakistán, en noviembre del año pasado. La OTAN insiste en que el incidente fue un accidente.

Funcionarios del gobierno de Obama también presionan para que Pakistán se involucre más en las conversaciones de paz con los talibanes.

Este fin de semana se prevén protestas cerca de los lugares en donde se llevarán a cabo las cumbres del G8 y la OTAN.

“Esperamos lo peor y deseamos lo mejor”, dijo Ross Rice, funcionario del FBI en Chicago. Esa “es la forma de describir cómo se desarrolla el fin de semana”.

Peter Bergen, Elise Labott y Ted Rowlands, de CNN, contribuyeron a este reporte