120 alumnas de una escuela en la provincia de Takhar fueron envenenadas el miércoles.

Por Nick Paton Walsh

(CNN) — Cinco niñas que fueron tratadas en un hospital de Afganistán el miércoles después de ser envenenadas en su salón de clases volvieron al hospital el jueves tras quejarse de que seguían con dolores de cabeza, vómitos y mareos, informaron las autoridades.

Las cinco niñas están entre las 120 que fueron al hospital tras ser envenenadas con un tipo de espray, de acuerdo con Hafizullah Safi, director de salud pública de la provincia de Takhar.

El miércoles, funcionarios dijeron que 40 de las víctimas todavía estaban en el hospital enfermas. No estaba claro si seguían en el hospital el jueves.

El incidente ocurrió en la escuela de mujeres Bibi Hajera en la provincia del norte de Afganistán.

Muestras de sangre han sido enviadas a Kabul en un esfuerzo por determinar qué sustancia fue usada, dijo. El resultado podría estar disponible hasta el próximo domingo.

“Un número de niñas de entre 15 y 18 años fueron llevadas de la escuela al hospital hoy”, dijo el director Habibullah Rostaqi el miércoles. “Generalmente, no están en condición crítica. Estamos cuidando de ellas, pero vamos a ver qué pasa después. Entendemos la situación, están traumatizadas”.

“El pueblo afgano sabe que los terroristas y el Talibán están haciendo estas cosas para amenazar a las niñas y evitar que vayan a la escuela”, aseguró Khalilullah Aseer, vocero de la policía de Takhar. “Es algo que nosotros y la gente creemos. Ahora estamos implementando la democracia en Afganistán y queremos que las niñas sean educadas, pero los enemigos del gobierno no lo quieren”.

Se han registrado varios casos de chicas que son envenenadas en escuelas en años recientes. En abril, también en la provincia de Takhar, más de 170 mujeres y niñas fueron hospitalizadas bajo sospecha de haber sido envenenadas después de tomar agua en la escuela. Funcionarios locales señalan a extremistas opuestos a la educación de la mujer.

Todos los incidentes involucran a mujeres, pero a principios de este mes cerca de 400 niños de una escuela en la provincia de Khost se enfermaron después de tomar agua de un pozo que, según un funcionario local, había sido envenenado.