(CNN) — La policía de Iraq reportó que un coche bomba estalló junto a un edificio gubernamental, dejando al menos 18 muertos y 125 heridos.
El ataque tenía como objetivo las oficinas de asuntos religiosos chiitas en el barrio de Bab al-Mouadham, en el centro de Bagdad.
El jueves, en un periodo de tres horas ocurrió una serie de explosiones que sacudió varias zonas de Bagdad, dejando al menos 14 muertos y decenas de heridos, informó la policía iraquí. No está claro quién cometió los ataques y si están vinculados.
Una de las explosiones del jueves tuvo lugar en Sulaa, una colonia chiita en el noroeste de Bagdad. Un coche bomba estacionado explotó frente a una gasolinera, matando al menos a 11 personas y dejando 36 heridos, informó la policía.
Las tensiones sectarias en Iraq ocurren luego de que en 2003 Estados Unidos encabezara la invasión que derrotó el dominio de los sunitas en el régimen de Saddam Hussein. Hussein fue ejecutado después de haber sido encontrado culpable por crímenes contra la humanidad por la matanza de chiitas en 1982, en aparente represalia por un intento de asesinato contra su vida.
La violencia sectaria que siguió a la invasión entre la mayoría chiita de Iraq y la minoría sunita prácticamente devastó al país.
Aunque la violencia ha disminuído, todavía hay ataques a diario.
Cerca de 4,500 estadounidenses y más de 300 soldados aliados murieron antes de que las últimas tropas estadounidenses se fueran en diciembre, mientras que las estimaciones sobre el número de iraquíes muertos rondan por encima de 100,000.
Las tensiones entre sunitas y chiitas aumentaron este año los temores de un posible regreso de la violencia, luego de que la mayoría chiita del primer ministro Nuri al-Maliki, acusó al vicepresidente sunota de utilizar su equipo de seguridad como un escuadrón de la muerte. Tariq al-Hashimi ha negado las acusaciones.