Atenas — Imagine abandonar a sus hijos debido a que no le alcanza para alimentarlos y vestirlos. Esto es una pesadilla para los padres en Grecia, pero para los que resulta cada vez más una realidad por la crisis económica.
Kassiani Papadopoulou, con 34 años y de Atenas, es madre soltera, desempleada e imposibilitada para cuidar a sus tres pequeños. Debido al clima de pobreza económica prevaleciente en Grecia, sintió que no tenía más opción que dejarlos en un hogar para niños, que trata de visitar algunas semanas.
“A una madre le resulta realmente difícil, verdaderamente trágico, abandonar a sus hijos”, dijo a CNN. “Pero cuando entiendes que no tienen la culpa y que merecen un futuro, lo mejor es hacer algo así, es mejor que tenerlos a tu lado sin siquiera un plato de comida”.
Tras años de recesión y duras medidas de austeridad, entre ellas recortes laborales y subida de impuestos, Grecia se encuentra en la desesperación financiera.
La Autoridad Estadística Griega, la cual compila datos para el Estado, dijo que la tasa de desempleo en el primer cuarto del año fue de 22.6%. También dijo que el 27.7% de la población en Grecia se encuentra al borde de la pobreza o enfrentándose al peligro de la pobreza. Las cifras no incluyen a grupos como los romaníes, gitanos, inmigrantes ilegales, la gente sin hogar y los que están al cuidado de una institución.
La fuertemente endeudada economía del país es dependiente de los fondos de rescate de la Unión Europea, del Banco Central Europeo y del Fondo Monetario Internacional. Sin embargo, la llamada Troika exige mayores recortes al gasto social, creando lo que los trabajadores sociales califican como una oleada de “huérfanos económicos”, abandonados no por falta de amor, sino de dinero.
“Creo que esta es la primera vez que he visto a tantas familias pobres pedir ayuda para sus hijos”, dice Stelios Sifnios, director de Aldeas Infantiles SOS, una organización europea de beneficencia que apoya a las familias griegas golpeadas, incluidos los orfanatos.
La autoridad no tiene un número total de huérfanos económicos, pero una de sus estadísticas señala problemas potenciales para las familias. Dice que el 22.9% de todos los tipos de familias con niños menores de 18 años están al borde o se enfrentan al peligro de la pobreza.
“Antes de la crisis económica, la mayor parte de nuestros niños provenían de familias con problemas, con papás que tenían adicción a las drogas o que eran alcohólicos. Ahora la mayoría de los recién llegados provienen de familias que no les alcanza el dinero”, añade.
Kassiani dice que quiere llevarse a los niños a casa, pero no tiene los recursos para hacerlo. “Me siento impotente por no poder valerme por mí misma”, dice, y culpa a los sucesivos gobiernos griegos de su difícil situación.
“Para mí, es [culpa] de todos los gobernantes. A todos sólo les ha importado ellos, no la gente y los pobres como nosotros, quienes deberían ser responsabilidad del Estado”. Pero en Grecia, el Estado apenas puede atender.