(CNNenEspañol.com) - 18 años sin justicia, 18 años sin verdad, 18 años de la explosión que dejo a 85 familias desmembradas. 18 años del peor atentado terrorista que azotó a la Argentina.
Este miércoles, a 18 años de esta tragedia y a las 9:53 de la mañana, la hora de la explosión en la sede de la AMIA en la Argentina, sonaron las sirenas y se volvió a realizar un acto en recuerdo de las víctimas y en reclamo de justicia.
Como todos los años se leyó la lista de nombres y edades de las 85 víctimas a la hora de la tragedia, y los asistentes respondieron con el pedido de JUSTICIA.
Sin embargo, este año el acto fue diferente, los familiares no tuvieron la oportunidad de expresarse, tras la polémica que generó el año pasado el discurso de los familiares que denunciaban las falencias de la investigación, e instaban al gobierno a no bajar los brazos. Este año, los familiares no tuvieron micrófono en el acto central y tuvieron que conformarse con hablar en el acto de Memoria Activa, una facción de familiares, que se realizó el martes por la noche y donde se condenó el encubrimiento y nuevamente se reclamó justicia.
Este año, fue un acto diferente. 18 jóvenes, menores de 18 años, que no habían nacido o tenían pocos días de vida en el momento del atentado, leyeron frases conmemorativas de cómo había modificado sus vidas este hecho.
Luego fue el titular de AMIA, Guillermo Borger, el encargado de hablar. Borger instó a INTERPOL a llevar a cabo las detenciones de los iraníes con orden de captura por este atentado y al gobierno que cumpla con su compromiso de no dejar que este atentado caiga en el olvido, y que colabore para que se sustancien los juicios contra los presuntos cómplices del atentado.
Fue un acto distinto, sin el protagonismo de los que perdieron a sus seres queridos, pero con el mismo dolor que hace 18 años.