LA HABANA, Cuba (CNN) – Diana Nyad está avanzando satisfactoriamente en su más reciente intento de nadar a Florida desde Cuba, dijo su equipo el domingo.
“No hay nada que la detenga ahora”, dijo el equipo en el blog de la nadadora.
Después de lanzarse a las aguas de La Habana en la tarde del sábado –un día antes de lo planeado originalmente- Nyad nadó 34 kilómetros, con 50 brazadas por minuto, según reportó su blog.
La distancia completa a Cayo Hueso, Florida, es de 165 kilómetros, un recorrido que se espera le tome a Nyad 60 horas en caso de que la atleta de 62 años consiga que este intento –su cuarto- sea exitoso.
“Después de una primera noche difícil”, Nyad “está cómoda, confiada y sigue nadando consistentemente”, dijo un mensaje en su cuenta de Twitter oficial.
Nyad fue picada por medusas en sus labios, frente, manos y cuello. Algunas de las picadas fueron de las medusas venenosas conocidas como avispas del mar, dijo su blog.
“Animada por su equipo mientras nadaba al lado del bote escolta, el Voyager, mientras comía algo esta mañana, levantó sus pulgares” y preguntó cómo estaba el personal, de acuerdo a las publicaciones de su blog. “Hoy se trata de nadar”, dijo Nyad citada en su blog. “No sé cómo llamar lo de anoche, probablemente supervivencia”.
Una fuerte oleada hizo que tuviera que nadar con más fuerza en la noche, dijo su blog, pero “la corriente actual ya no está en su contra”.
Nyad empezó a nadar un día antes debido a que el agua parecía ser “fantástica”, dijo Nyad en una conferencia de prensa antes de empezar su travesía. Su equipo, el Xtreme Dream, estuvo “pensando que ‘tenemos que salir’”, dijo.
El primer intento de Nyad de cruzar el Estrecho de Florida fue en 1978. Esa vez la fuerte marea la dejó agotada, delirante y a menos de la mitad de camino de la meta.
Volvió a intentarlo dos veces el año pasado. En un intento tuvo que parar por un ataque de asma de 11 horas y luego fue derrotada por las numerosas picadas de medusas venenosas.
Nyad insistió en que estaba lista para volver a intentarlo ahora, y reconoció el viernes que estaba “sintiendo una presión interna tremenda de que ésta tiene que ser, ésta tiene que ser la última vez”.
La mujer está en el agua sin una jaula protectora de tiburones, contando sólo con repelentes electrónicos de tiburones y con un equipo de buzos para alejarlos.
En los años setenta, Nyad ganó múltiples maratones de natación y fue una de las primeras mujeres en darle la vuelta a la isla de Manhattan. Ostenta el récord mundial del recorrido en nado más largo del mundo: 164 kilómetros desde la isla de Bimini en Bahamas hasta Jupiter, Florida.
Nyad dice que tenía 8 años de edad cuando soñó por primera vez con la posibilidad de nadar por el Estrecho de Florida. En ese entonces, salió de su casa en Florida y estaba de viaje en Cuba en los años cincuenta, antes de que Fidel Castro liderara la toma del poder en Cuba y se perdieran las relaciones con Estados Unidos.
“Solía pararme en la playa y le decía a mi madre: ‘Me pregunto si alguien puede nadar hasta allá’”, recordó Nyad, apuntando a los Cayos.
En sus sesenta, dice todavía se siente “vital y poderosa, y definitivamente no vieja”. Una travesía exitosa inspiraría a las personas de su edad o mayores a no dejar que la edad los obstaculice, dijo Nyad.
“Cuando camine por la costa de Florida, quiero que millones de hermanos y hermanas de AARP (Sociedad Estadounidense de Personas Retiradas) me vean y digan: ‘Voy a escribir esa novela que pensé que ya era muy tarde para escribir. Voy a ir a trabajar a África en esa granja con esas personas que necesitan ayuda. Voy a adoptar un hijo. No es muy tarde, todavía puedo vivir mis sueños”, dijo.