Por Michael Martinez, CNN
(CNN) – La tristemente célebre “Prostituta de los perros calientes” de Nueva York presuntamente intentó ofrecer un servicio sexual a un cliente, pero sin saber que éste era un detective encubierto, y ahora enfrenta cargos de prostitución, dijo la policía.
Catherina G. Scalia, de 47 años, residente de East Rockaway, Nueva York, fue arrestada después de que respondió a una llamada de un hotel en Long Island, dijo la policía. Incluso condujo su vehículo de venta de perros calientes hasta el lugar, dijeron las autoridades.
Scalia le dio al policía encubierto un masaje —sin tener licencia de masajista— en la noche del viernes, según la policía. También está acusada de práctica no autorizada.
Luego se produjo su supuesta oferta de servicios adicionales, dijo la policía.
“También ofreció un acto sexual por una cantidad no determinada de dinero. Scalia fue arrestada sin incidentes”, dijo un comunicado del Departamento de Policía del condado Nassau.
Scalia objetó los cargos en su comparecencia el sábado en una corte del condado en Hempstead, según reportó la cadena afiliada de CNN WCBS. “Siguen haciéndome montajes. Estoy quebrada. No tengo trabajo. Todos estos arrestos son una trampa”, dijo Scalia.
Cuando la periodista de CNN Jeanne Moos hizo un perfil de Scalia y su venta de perros calientes hace un año, Scalia aseguró que era una stripper, no una prostituta.
En ese entonces, Scalia dijo que se había declarado culpable en un caso criminal reciente: “Me declaré culpable de ser stripper. Una stripper no es una prostituta”, le dijo a CNN.
De hecho, en el incidente del año pasado, Scalia en realidad se declaró culpable del delito menor de prostitución después de que un oficial encubierto comprara perros calientes en su puesto de comidas, tomara una tarjeta de negocios ofreciendo bailes toplees y recibiera un lap dance en la casa de la mujer.
Hace cerca de nueve años, Scalia enfrentó un cargo similar de prostitución.
Scalia tien cuatro hijos adolescentes, pero dijo que el año pasado estaban bajo custodia de la abuela. “A mis hijos les digo que su madre es una stripper. Tienen que vivir con eso hasta el día en que se mueran”, dijo Scalia.
El puesto de venta de perros calientes de Scalia tiene el siguiente eslogan: “Get a little wiggle with your wiener”, algo así como “Obtén un poco de meneo con tu salchicha”.