(CNNMéxico) — El presidente del gobierno español, Mariano Rajoy, dijo este jueves que no renunciará a su cargo, en medio del escándalo de corrupción al interior del Partido Popular, la fuerza que lo impulsó en 2011.
“Algunos intervinientes han exigido mi dimisión como presidente del gobierno de España. Les responderé de forma muy clara y directa: no”, dijo Rajoy en una comparecencia ante el Congreso de los Diputados. “Ni voy a dimitir ni voy a convocar elecciones legislativas, que quede muy claro”.
El mandatario fue acusado ante un juez por el extesorero de su partido, Luis Bárcenas, de haber recibido sobresueldos no declarados provenientes de donaciones anónimas de empresarios, a través de una contabilidad “B”.
En la comparecencia de este jueves, el líder del Partido Socialista Obrero Español (PSOE), Alfredo Pérez Rubalcaba, reiteró el llamado a que el jefe de gobierno “se marche” por este escándalo.
“Usted está haciendo daño a España. Por eso hoy le pido a usted que se marche”, dijo Rubalcaba, y acusó a Rajoy de no decir la verdad a los españoles sobre la presunta contabilidad oculta de su partido. “Es imposible que no supiera”, señaló el líder socialista.
Algunos diputados inlcuso pidieron elecciones anticipadas (la legislatura lleva poco más de un año, y en España duran cuatro).
Otros reprocharon a Rajoy el supuesto intercambio de mensajes telefónicos que mantuvo con Bárcenas en marzo pasado, cuando ya era investigado, y que incluía algunas palabras de ánimo, según reveló hace poco el diario El Mundo.
El comunista Cayo Lara acusó a Rajoy de apoyar “a un delincuente”.
Bárcenas, gerente y tesorero del PP entre 1990 y 2009 está en prisión provisional desde el 27 de junio por presunto fraude fiscal, luego de que se le descubriera una cuenta con 47 millones de dólares en Suiza.
Rajoy niega las acusaciones del extesorero del PP. Ante los diputados, el presidente español dijo que su error fue dar su confianza a Bárcenas, alguien “que no la merecía”.
Además, descartó que en su partido se lleve a cabo una doble contabilidad, “ni se oculta ningún delito”.
“Me equivoqué en mantener la confianza en alguien que ahora sabemos que no la merecía”, dijo Rajoy.
“Vengo a frenar esa erosión de la imagen de España que algunos cultivan y a desmentir las mentiras, manipulaciones e insinuaciones maliciosas que han jaleado, entre otros, algunos dirigentes políticos” contra el Partido Popular, agregó.
“Nada relacionado con este asunto me ha impedido ni me impedirá gobernar”.
Rajoy, bajo creciente presión desde que en enero su nombre se vio envuelto en este escándalo, aceptó romper su silencio sobre Bárcenas compareciendo ante una cámara donde dispone de mayoría absoluta.
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