Por Phil Gast
(CNN) — Para el guerrero o el aspirante a rescatista (los héroes) no hay tiempo para apreciar lo que el clic de una cámara significa para una nación que sufre.
Seis marinos todavía tenían un enemigo con el cual luchar después de que levantaron la bandera estadounidense en el Monte Suribachi de Iwo Jima. Tres morirían en esa batalla de 1945.
El 11 de septiembre de 2001, tres bomberos de la ciudad de Nueva York se unieron a aquellos que se apresuraron a llegar al World Trade Center para buscar sobrevivientes que nunca serían encontrados. Posteriormente en esa tarde, levantaron una pequeña bandera que quitaron de un bote cercano. Una pared monocromática de escombros grises aparecía en el fondo.
“No hay autocompasión en esa imagen”, dijo el capitán Patrick Burns, coordinador de Nueva York de la Marina de Estados Unidos, en ese momento.
Las fotografías de las personas que levantaban la bandera en Iwo Jima y en la Zona Cero rápidamente se convirtieron en íconos, momentos en el tiempo que galvanizaron a estadounidenses que encontraron nueva solidaridad y unidad.
Y aunque se conocen los paraderos de la bandera de Iwo Jima (está en el Museo Nacional del Cuerpo de Marines en Estados Unidos), el destino de la bandera 0.9 por 1.5 metros del World Trade Center se volvió un misterio.
The Flag de CNN Films, que se estrenó el pasado miércoles en CNN, explora qué pudo haber ocurrido con esta.
Es una historia llena de misterio.
Después de horas de haberla levantado, la bandera desapareció del lugar del World Trade Center. Los creadores de la película documentaron esto al observar el fondo de las fotografías tomadas poco después.
La bandera que posteriormente voló sobre el Estadio de los Yankees como un reproche patriótico al terrorismo y que revoloteó sobre la USS Roosevelt mientras el avión enviaba misiones a Afganistán, fue representada como la misma bandera que fue alzada.
La bandera original fue “extraviada, robada o guardada por fuerzas desconocidas en el caos de la Zona Cero”, dijeron los directores del filme en un comunicado.
La bandera levantada, un símbolo nacional
La deshonestidad no estuvo detrás de la historia de los viajes de la bandera, dijo Michael Tucker, quien produjo, escribió y dirigió The Flagcon su esposa, Petra Epperlein. Había cosas más importantes que hacer que mantenernos al tanto de una sola bandera, a la que rápidamente se le unieron varias otras.
“(Para) las personas que estaban allí, lo más importante para ellos era recuperar personas, incluso cuando sabían que no había sobrevivientes”, dijo Tucker.
Cuando un oficial fue enviado para levantar la bandera una semana o más después, aparentemente recibió una bandera más grande y la volaron en eventos posteriores.
“No tenían razón para creer que no era la bandera”, dijo Tucker.
La historia de la bandera desaparecida incluye una pregunta mayor y más filosófica: ¿en realidad la bandera es lo más importante o los ideales que representa?
Por su parte, la fotografía de la bandera en el WTC (tomada por Tom Franklin del periódico Record en Bergen, Nueva Jersey) rápidamente se convirtió en un símbolo.
Fue mostrada en la portada de Newsweek, con las palabras, “Dios bendiga a América” y la imagen podía verse en todo desde tazas para café hasta tatuajes.
“La mayoría de las personas lo verán pasar una o dos veces en su vida; donde toda la nación está unida”, dijo Tucker.
“Fue el peor de los tiempos y probablemente lo mejor de Estados Unidos”, dijo Tucker a CNN.
Los creadores de The Flag hablaron con varios fotógrafos sobre ir a la Zona Cero y las escenas desgarradoras que los esperaban. La película es en parte forense, con un experto que compara fotografías de la bandera original y otras que parecían ser más grandes.
Entre esos entrevistados estaba la pareja que era dueña del yate del que fue tomada la bandera por parte de un bombero para colgarla en el sitio del WTC.
Querían donar la bandera a la Institución Smithsonian de Estados Unidos y pidieron prestada brevemente la bandera para una ceremonia un año después de los ataques .
“Cuando obtuvimos la bandera, estábamos bastante impactados de que era la bandera equivocada”, dijo Shirley Dreifus.
“…Esta nos envuelve a los dos y no somos las personas más delgadas de la Tierra… así que sabíamos de inmediato que era la bandera equivocada”.
¿Importa si era la bandera real?
Entrelazadas en toda la película, que se basa en un libro de David Friend, hay discusiones sobre la naturaleza poderosa de una bandera.
“No somos un país basado en religión o etnias o incluso herencia cultural”, dijo Burns a los cineastas. “Somos un país basado en ideas y una filosofía. Y eso es lo que es la bandera”.
Jodi Goglio, quien trabaja para Eder Flag, dijo que una bandera “te hace sentir que somos más grandes que solo nosotros”.
Una miembro joven del equipo del USS Roosevelt se limpió las lágrimas mientras describía tener la supuesta bandera del WTC a bordo.
“Solo hace que lo que haces sea mucho más, wow, significativo”, dijo.
Cuando se le preguntó si importaba si la bandera era recuperada, un visitante al memorial del 9/11 dijo, “importaría. Me importaría a mí”. Otro dijo, “creo que importaría para las familias que perdieron a sus seres queridos”. Entre aquellos que murieron había 343 bomberos”.
Thomas Koehler, un detective jubilado del Departamento de Policía de Nueva York, dijo que preferiría no saber qué pasó con la bandera del WTC.
“Si tuvieras la bandera de verdad… el cínico dentro de mí (diría), las personas la quieren. Le pones un precio… y entonces se convierte en algo más”.
Tucker probó de primera mano el poder de una bandera mientras hacíaGunner Palace con Epperlein.
Lanzado en 2004, el documental cuenta la historia de un grupo de soldados estadounidenses que pelearon en Bagdad.
La insurgencia iraquí crecía y Tucker, un estadounidense, quería irse en primavera de 2004 para regresar a su casa, en ese entonces en Alemania.
Se quedó en una instalación de Estados Unidos en el aeropuerto y despertó para encontrar una pequeña bandera estadounidense doblada debajo de su almohada, un regalo habitual realizado por algún grupo.
“Estaba tan abrumado con emoción. Esa bandera significa el hogar”, dijo Tucker. “Aunque esa experiencia no es únicamente estadounidense, cuando estás a cientos de kilómetros de tu casa, bajo estrés y ves los colores, te recuerda a tu gente”.