Por Antonia Mortensen, CNN
(CNN) – La primera ministra danesa Helle Thorning-Schmidt apareció en todas las portadas después de hacerse un autorretrato con el móvil (selfie), sentada entre el primer ministro del Reino Unido, David Cameron, y del presidente de Estados Unidos, Barack Obama, en la ceremonia conmemorativa de Mandela el martes.
La foto “selfie” adquirió proporciones virales en línea casi inmediatamente. Pero se te puede perdonar si no sabes quién es esa belleza rubia que se toma una fotografía con su teléfono con dos poderosos políticos, a menos que seas danés, como en mi caso, o que estés al tanto de los asuntos de actualidad.
Muchos periódicos están cuestionándose si era apropiado que “Gucci Helle”, como la llaman muchos daneses por su sentido del estilo, se tomara una “selfie” durante la ceremonia conmemorativa del martes. El Times escribió que Obama puso a prueba los límites de la “etiqueta en un funeral” (a pesar de que la ceremonia no fuera un funeral) con el autorretrato.
Aunque podrían haber actuado con menos gracia en el momento que se tomó la fotografía, parecía que estaban disfrutando de la compañía mutua y Thorning-Schmidt no se pudo resistir a la tentación de documentar ella misma el momento. Después de todo, podría ser que nunca tendría esa oportunidad de nuevo.
Muchos daneses no parecen haberse tomado el asunto tan en serio como algunos de los periódicos en Bretaña. Como lo dijo el compañero escandinavo Yerco Sánchez en reacción a la fotografía: “Un estilo más escandinavo en la política podría beneficiar mucho al mundo”.
Algunos daneses están desconcertados por la reacción global al “selfie” -debido a que no ha llegado a sus titulares aún- posiblemente porque tienen un enfoque más relajado en general, como lo demostró su primera ministra en Johannesburgo. El consenso general entre los daneses parece ser que los líderes se mostraron serios cuando debían serlo, y el breve momento de frivolidad no representa su comportamiento durante toda la ceremonia. Los medios daneses han comentado acerca de la atención que la “selfie” ha ocasionado en los medios británicos, en donde se ha cuestionado si es apropiado o no. Los daneses, después de todo son conocidos por su sencillez y porque su país tiene una de las sociedades más equitativas del mundo.
Y parece que Thorning-Schmidt no se sentía intimidada por encontrarse en medio de esa pareja poderosa, además parecía ser que disfrutaba de su compañía: ¿tal vez estaba aportando su grano de arena a las relaciones trasatlánticas? A aquellos que les escandalizó ver a los políticos divertirse en una situación como lo era la ceremonia deberían de recordar que los líderes no eran los únicos que se tomaban “selfies” en la ceremonia. Algunos incluso dicen que eso muestra el lado humano de nuestros líderes quienes, después de todo, no son robots.
Esta no fue la primera ocasión en que la líder danesa se reuniera con el presidente estadounidense: Obama dio la bienvenida a Thorning-Schmidt en febrero de 2012 y de nuevo se encontraron en Estocolmo cuando Obama realizó un viaje allí. Cuando ella realizó la visita a Washington, llevaba como primera ministra únicamente cuatro meses, y era la primera mujer en ocupar el cargo.
¿Quién dice que uno no puede tenerlo todo? Thorning-Schmidt ciertamente parece que sí lo tiene: belleza, inteligencia, familia, poder, y parece que lo disfruta todo al mismo tiempo.
Thorning-Schmidt está casada con el británico Stephen Kinnock, hijo del exlíder laboral Neil Kinnock. La pareja se conoció cuando estudiaban en la Universidad Europea en Brujas. Se casaron en 2006 y juntos tienen dos hijas. La pareja se conoció cuando estudiaban en la Universidad Europea en Brujas. Fueron investigados en 2010 por denuncias de evasión fiscal, pero luego fueron desvinculados de las mismas.
Nadie tiene aún una copia de la “selfie” que tomó la primera ministra. Tal vez la enviaron a Snapchat —una aplicación de mensajería de fotografías en donde las imágenes se autodestruyen después de un período de tiempo— o tal vez es para su álbum personal.