(CNN México)— El Congreso de Honduras aprobó este viernes una ley que autoriza a la fuerza aérea a derribar las aeronaves sospechosas de transportar droga, en busca de frenar el tráfico de cocaína a través del país centroamericano.
Honduras es el destino de la mayoría de los vuelos que trasiegan cocaína desde Sudamérica y es utilizado por los cárteles mexicanos de la droga en su tránsito por Centroamérica hacia Estados Unidos, el principal mercado de estupefacientes en el mundo, según las autoridades.
“Si existe una aeronave no identificada o no autorizada será sometida al uso progresivo de la fuerza, a través de la indagación, persuasión y como uso máximo la neutralización definitiva de la amenaza”, asienta la ley, que establece además que la orden para disparar contra la aeronave será dada por el ministro de Defensa.
El derribo de al menos dos avionetas civiles por parte de la fuerza aérea hondureña en 2012, que presuntamente transportaban droga, causó malestar en Estados Unidos, que suspendió por casi tres meses la ayuda de radares que ofrece a autoridades de Tegucigalpa para la intercepción de aeronaves civiles que trasiegan cocaína.
Washington es el más importante cooperante de Tegucigalpa en la lucha contra el narcotráfico.
“Se trata de luchar frontalmente contra el narcotráfico, evitar que los carteles de la droga introduzcan a nuestro país cocaína”, dijo el legislador del gobernante Partido Nacional, Oscar Alvarez, que presentó el proyecto.
“Nosotros estamos poniendo la sangre de hondureños que día a día mueren en los conflictos generados por el tráfico de droga”, añadió.
Honduras, asolada por una escalada de la violencia ligada al narcotráfico, es situada por las Naciones Unidas, como el país que registra más homicidios en el mundo, al alcanzar en el 2012, 85 asesinatos por cada 100.000 habitantes.
La legislación fue aprobada por 85 diputados del Congreso, unicameral, dijeron fuentes del parlamento.
El diputado de la comisión de Seguridad del Congreso, Mario Pérez, dijo que en el caso de aeronaves no identificadas dentro del espacio aéreo hondureño, que no atiende las advertencias de la aviación local “la última medida es la neutralización, es dispararle al avión”.
Honduras se dispone a adquirir de Israel tres radares para detectar los vuelos de avionetas que aterrizan con cocaína en su territorio procedentes de Sudamérica.
En noviembre, una avioneta con matrícula mexicana fue interceptada y destruida por la fuerza aérea de Venezuela, causando roces diplomáticos entre los gobiernos de ambos países.