Por Yasmin Khorram

(CNN) — El término “ingeniero de software” evoca imágenes de hombres jóvenes de caras pálidas con mala postura y limitadas habilidades sociales. Y la gente piensa que las modelos son todo belleza y nada de cerebro.

Al menos, esos son los estereotipos.

Entonces ¿qué hará el mundo con Lyndsey Scott, modelo de Prada y Victoria’s Secret, quien pasa su tiempo libre creando aplicaciones para teléfonos móviles? La mujer de 29 años ha aparecido en las principales revistas como Harper’s Bazaar, W y British Vogue, pero parece sentirse más orgullosa por haber logrado que Apple aprobara sus aplicaciones para iPhone e iPad.

Si estás en un móvil mira las fotos aquí:

“Con el modelaje nunca tienes el control sobre nada”, le dijo Scott a CNN. “Así que ser capaz de tener el poder absoluto con estas aplicaciones que desarrollo es muy gratificante”.

Scott ha creado varias aplicaciones para plataformas iOS. Dos se están vendiendo actualmente en la tienda de Apple y ella se está preparando para lanzar una aplicación de redes sociales en las próximas semanas.

Scott: Si significa ser inteligente y ser una buena programadora, entonces “no tengo problema en ser una nerd”.

Antes que la programadora autodidacta comenzara a modelar para diseñadores de alta costura, como Louis Vuitton, Prada, Gucci, Fendi y Vera Wang, ella era una adolescente desconocida de Nueva Jersey que le encantaba jugar juegos de calculadora.

En la secundaria, aprendió por sí misma la documentación del software y pronto aprendió a programar en su calculadora TI-89.

“En ese momento ni siquiera me daba cuenta que estaba programando”, dijo Scott. “Al principio me metí en esto solo para crear juegos divertidos y entretenerme”.

Sin embargo, sus habilidades para programar juegos no le otorgó muchos puntos entre sus compañeros de clase. La modelo de 1,80 metros dijo que desarrolló tarde y que hablar de su crecimiento “aún es algo difícil de hacer” debido al acoso y las burlas que tuvo que soportar.

“En la secundaria las cosas se pusieron tan mal que ni siquiera podía mirar a los demás cara a cara”, dijo Scott. “Me escondía en la escuela así no tenía que almorzar en la cafetería o ver a la gente entre una clase y la siguiente”.

En Amherst College, Scott aprendió los lenguajes de programación Java, C++ y MIPS, mientras se especializaba en teatro y en informática. Pero en lugar de seguir una carrera de programación, ella se dedicó al modelaje.

Ella obtuvo su gran oportunidad en el modelaje en el año 2009 cuando se convirtió en la primera afroamericana en firmar un contrato exclusivo con Calvin Klein para la Semana de la Moda de Nueva York.

“Sucedió en un momento en que no había ningún interés en mí como modelo”, dijo. “Siempre soñé con eso, pero no lo esperaba en absoluto. Estaba más que sorprendida”.

Ese mismo año Scott fue elegida para uno de los desfiles de moda más codiciados del año: Victoria’s Secret. Ella dijo que estaba “sorprendida y honrada” de unirse a la alineación de supermodelos que incluía a Heidi Klum, Miranda Kerr y Alessandra Ambrosio.

Mientras tanto, ella continuó desafiando las expectativas aprendiendo por sí misma cómo programar en Python y Objective-C.

“Creo que muchas modelos pensaban que yo era rara por tener una computadora en mi regazo en medio de la fila del casting”. “Realmente nunca hablé de programación en el negocio del modelaje. Mantuve esos mundos muy separados.

La primera aplicación para iOS de Scott era un proyecto basado en la caridad destinada a ayudar a los jóvenes investigadores en Uganda. La aplicación, Educate!, encuentra patrocinadores para los estudiantes ugandeses y los guía para convertirse en líderes y empresarios.

“Supe sobre Educate! en la universidad. Era una organización fundada por dos estudiantes de Amherst. Cuando descubrí que Uganda tiene la población más joven del mundo y la mayor tasa de pobreza infantil, me quise involucrar”, dijo ella.

“Fue rechazada (por Apple) varias veces. Tuve una gran lucha con Apple, yendo de un lado para otro, así que fue un gran alivio cuando finalmente pasó”.

Desde entonces ella ha desarrollado muchas más, incluyendo iPort, la cual ayuda a modelos y otros tipos de creativos a organizar sus portafolios profesionales en un iPad.

“Noté que muchas modelos usaban iPads para mostrar su trabajo a los directores de casting, pero se veían desordenados y no tenían una linda interface”, dijo Scott. “Entonces creé iPort lo más funcional posible que un portafolio real, pero mucho más práctico”.

Su hermano, Matthew, es uno de sus mayores seguidores.

“Lyndsey es una mezcla entre Bill Gates y Giselle (Bundchen)”, dijo Matthew Scott. “Ella combina su pasión por el modelaje y su pasión por la programación para ayudar a mejorar nuestro mundo”.

El mes pasado, Scott visitó una escuela de secundaria en el barrio de Harlem de la ciudad de Nueva York para hablar con los estudiantes interesados en la programación de ordenadores.

“Tenemos esta idea de la gente en la tecnología de ser y tener cierto aspecto”, dijo ella. “Ese estereotipo es destructivo y creo que esa es parte de la razón por la que hay tan pocas programadoras mujeres y minoritarias”.

Scott dijo que ahora la programación de computadoras se ha convertido en una segunda profesión para ella. Ella tiene planes para muchas aplicaciones más y también quiere aprender a programar para Android.

La mujer joven de doble carrera nunca se hubiera definido a sí misma como una nerd durante su desarrollo porque lo veía como una palabra hiriente en ese entonces.

“Pero ahora que soy mayor, si eso significa ser inteligente y tener intereses como la informática, entonces no tengo problema en ser una nerd”, dijo.