(CNN Español) – Aunque el oficialismo en Colombia sufrió un golpe en las elecciones legislativas, se consolida como la primera fuerza política del país.

El expresidente Álvaro Uribe obtiene una importante victoria al irrumpir con fuerza en el Congreso donde será senador por el partido Centro Democrático.

El mapa político sin duda cambió.

La coalición de partidos que apoyan al presidente Juan Manuel Santos, quien aspira a la reelección, obtuvo el apoyo suficiente para seguir siendo mayoría; aunque perdió una veintena de escaños.

Así, el Gobierno se aseguró el camino hacia la gobernabilidad —en caso de que Santos sea reelegido—, pero tendrá que lidiar con un opositor acérrimo que llego al Congreso para hacerse escuchar.

El Centro Democrático es una fuerza disidente muy critica.

En entrevista con Patricia Janiot, Sergio Díaz-Granados, director del oficialista Partido de la U, dijo que el resultado fue satisfactorio pues fue el movimiento más votado en ambas cámaras y destacó que la coalición de Gobierno (con el Partido Liberal y Cambio Radical) es mayoría, lo que permite conseguir las reformas que busca Santos.

Díaz Granados dijo que este Congreso elegido es “plural” en donde habrá diversidad de ideas.

Uno de los temas clave de cara al próximo gobierno es los diálogos de paz con las FARC, a los que Uribe se opone. Pero Díaz-Granados dijo que quien debe aceptar o rechazar los posibles acuerdos es el pueblo colombiano.

Díaz-Granados calificó de “demagógicas” las declaraciones de miembros del Centro Democrático en las que sugirieron que hubo fraude electoral.