Por Alexander Felton y Laura Smith-Spark
(CNN) — Un trabajador médico de las Naciones Unidas, quien quedó infectado de ébola mientras trabajaba en Liberia, murió en Alemania.
Su fallecimiento está generando más cuestionamientos acerca de cómo los trabajadores de la salud son equipados para hacer frente a los casos de la enfermedad.
El hombre tenía 56 años y era de origen sudanés, dijo un vocero del hospital de St. Georg en Leipzig. Estaba siendo tratado en una sala de aislamiento segura allí. Y la clínica dijo la semana pasada que sus médicos y personal estaban “perfectamente preparados” para la tarea.
A raíz de la muerte del hombre, Alemania está tratando sólo otro paciente de ébola, según el vocero del hospital St. Georg Constantin Sauff.
El otro paciente está siendo atendido en Frankfurt. Un paciente que estaba siendo tratado en Hamburgo recibió el alta médica tras recuperarse, dijo Sauff.
La semana pasada, una asistente de enfermería española se convirtió en la primera persona en contraer el virus en Europa en el brote actual. Sigue en estado crítico y tiene problemas para respirar, dijeron las autoridades.
En una carta distribuida el lunes, Javier Limón, su esposo, dijo que recibió sólo 30 minutos de entrenamiento para ponerse el equipo de protección, y pidió la renuncia del ministro de salud regional de Madrid por su manejo del caso.
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El Centro Europeo para el Control y la Prevención de Enfermedades dijo que el hospital de Madrid donde está siendo tratada Teresa Romero Ramos no cumple con todos los estándares establecidos para la atención del ébola.
Y una enfermera en Dallas, Nina Pham, es la primera en haber contraído el virus en Estados Unidos. Ella había cuidado al ciudadano liberiano Thomas Eric Duncan, quien contrajo el ébola en Liberia y murió de la enfermedad en el hospital.
Liberia es uno de los países más afectados por el virus mortal, junto con Sierra Leona y Guinea. La Organización Mundial de la Salud estima que más de 4,000 personas han muerto a causa de los casos confirmados o sospechosos del virus.
Claudia Otto contribuyó con este reporte.