(CNN) -— En la mayoría de los días, el hermoso Gideon Putnam Resort & Spa en Saratoga Springs, Nueva York, se ve como el lugar perfecto para comenzar un nuevo romance. Sin embargo, en San Valentín de 2014 fue usado para terminar uno.
Así fue la historia:
Ese fue el día en el que una pareja de Long Island, Nueva York, con la ayuda de una empresa llamada DivorceHotel, se reunió por última vez como marido y mujer para finalizar los procedimientos legales y hacer oficial su divorcio.
Casados durante 25 años con cuatro hijos, Antonio y Kathie (quienes prefirieron no dar sus apellidos) tienen cuarenta y tantos años. Antonio trabaja en el negocio de la construcción en Nueva York, Kathie es una profesional médica.
En medio de los exuberantes jardines del resort en los pies de la Región Adirondack de Nueva York, los detalles de su separación serán oficiales en tres días, con vino y quizá tratamientos de spa a un lado.
“El hotel en realidad es conocido por bodas”, dice Kathie. “Tiene un gran spa y está en una gran ciudad con una atmósfera realmente buena.
“Si te estresas puedes recibir un masaje o un facial”.
Aunque comparten un “sentido del humor retorcido”, la pareja insiste que su divorcio en el día de San Valentín no es un asunto de broma.
“Intentamos no volvernos locos por el divorcio”, dice Kathie. “Fue un largo trayecto para finalmente tomar esta decisión; ya sea que estés casado durante cinco o 10 o 25 años, el divorcio nunca es fácil, pero es lo mejor para nosotros y para nuestra familia, los seis de nosotros.
“No nos odiamos y no nos odiaremos y esto tiene mucho que ver con eso. No tomamos esto como broma, pero todavía podemos bromear sobre esto”.
Si esa actitud sobre algo tan potencialmente devastador como el divorcio te sorprende, la historia detrás de la empresa que facilita lo que llama una “ceremonia especial” podría convertirte en creyente.
¿Qué es DivorceHotel?
Aunque combinar el divorcio y las vacaciones podría parecer tan estadounidense (y amigable) como el pollo frito y los waffles, DivorceHotel en realidad es una empresa holandesa, fundada en Países Bajos en 2011 el día de San Valentín, si es que puedes creerlo.
La empresa en realidad no es dueña ni opera ningún hotel; se asocia con varias propiedades para organizar procedimientos de divorcio, pero dice que el concepto detrás de su visión de “vacaciones de divorcio” es pragmático y positivo.
“Comenzamos DivorceHotel debido a que muchos procedimientos de divorcio terminan en peleas que duran meses y a veces años”, dice el fundador de la empresa, Jim Halfens, quien no está ni casado ni divorciado. “El elemento de tiempo destruye muchos procedimientos de divorcio y muchos abogados y otros profesionales retrasan procedimientos a propósito con base en su tarifa por hora”.
DivorceHotel ofrece servicios de meditación antes de los procedimientos finales de divorcio, durante los cuales se aplica una estricta línea de tiempo de tres días para acabar con todo.
Opera con una tarifa plana
La pareja le dice a CNN que pagan un total de 6.500 dólares por su divorcio; eso incluye meditación y lidiar con el fin legal del divorcio, la cuenta del hotel y el fin de semana en el resort, incluidas algunas comidas y 1.000 dólares más o menos en tarifas del estado.
“Mientras más dure el procedimiento del divorcio existe un mayor riesgo de que el procedimiento fracase, debido a que más y más personas con opiniones se involucrarán y se volverá complejo”, dice Halfens. “Podemos separarnos de nuestros esposos en una forma limpia y positiva”.
“Tenemos amigos que hemos visto pasar por divorcios y normalmente tarda años”, dice Antonio. “Incluso cuando comienza amigablemente, para el momento en que se llega a juicio todos hierven con odio y hacen todo tipo de acusaciones locas.
“Un amigo mío estuvo casado durante cinco años y medio y más de 30,000 dólares con los que no podían ponerse de acuerdo (en mediación), y terminó costándole 200,000 dólares (en su mayoría por honorarios legales) y probablemente va a costarle su casa”.
Antonio y Kathie viajarán al resort separadamente y se quedarán en habitaciones separadas.
“No ansío este fin de semana, pero le quita mucho estrés a una situación que ya es estresante”, dice Kathie, enfatizando que la separación de la pareja es amigable. “Hace que sea mucho más fácil lidiar con esto”.
¿Pero por qué el día de San Valentín?
Facilitar una situación difícil suena bien, ¿pero por qué en el día asociado con cajas de chocolates en forma de corazón y otra sentimentalidad?
“Cuando piensas en esto, este fin de semana tiene dos significados”, dice Kathie, quien, junto con Antonio, dice que el momento del día de San Valentín es pura coincidencia. “El viernes es viernes 13. Después tenemos el día de San Valentín. Intentamos mantener nuestro sentido del humor”.
¿Helfens tiene algo en contra del día de San Valentín?
“Comenzamos DivorceHotel en 2011 el día de San Valentín para mostrarle al mundo que creemos que es posible separarse en una forma positiva”, dice. “Es más que tengamos una asociación con el día de San Valentín; la positividad”.
“Podrías decir que esta es especial. Será la primera vez en nuestra existencia que procesaremos un divorcio el día de San Valentín”.
“Especial” podría no ser la palabra por la que Antonio y Kathie se decidirían; ambos aclaran que el proceso de decisión del divorcio fue increíblemente difícil y doloroso, pero al menos están satisfechos con su decisión de encargarse con los detalles de la forma en la que lo han hecho.
“Toda la noción de sentarse en el ambiente frío y antiséptico de una corte o una sala de conferencias con abogados y discutir a fondo todos los detalles de mi vida, no quería eso”, dice Antonio. “Así no fue como comenzamos nuestra relación y no es como deberíamos terminarla.
“Esto es civilizado”.