Por Evan Perez y Wes Bruer
Washington (CNN) –– Ellos están llevando a cabo ataques terroristas esporádicos contra la policía, han amenazado con ataques contra edificios del gobierno y rechazan la autoridad del gobierno.
Un nuevo informe de inteligencia, distribuido por el Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés) a principios de este mes y revisado por CNN, se enfoca en amenazas de ciudadanos soberanos de extrema derecha, y surge mientras que la administración de Obama lleva a cabo una conferencia en la Casa Blanca para centrar los esfuerzos en la lucha contra el extremismo violento.
Algunos grupos federales y locales de aplicación de la ley consideran que la amenaza terrorista interna de grupos de ciudadanos soberanos es igual —y en algunos casos, superior— a la amenaza de grupos terroristas islámicos extranjeros, tales como ISIS, que llaman la atención de un mayor público.
El informe del DHS, producido en coordinación con el FBI, considera que han ocurrido 24 ataques violentos relacionados con ciudadanos soberanos en todo Estados Unidos desde 2010.
El gobierno dice que estos son los extremistas que creen que pueden pasar por alto las leyes y que sus derechos individuales están bajo ataque en los casos de rutina diaria; como por ejemplo, cuando los detienen por una infracción de tránsito o cuando se les pide que obedezcan una orden judicial.
Han arremetido contra la autoridad en incidentes como el que ocurrió en 2012, en el que al parecer un padre y un hijo se involucraron en un tiroteo con la policía de Louisiana, en un enfrentamiento que comenzó porque un oficial los detuvo por una infracción de tránsito. Dos agentes murieron y muchos otros resultaron heridos en el enfrentamiento. Los hombres eran extremistas ciudadanos soberanos que afirmaban que la policía no tenía autoridad sobre ellos.
Entre los hallazgos de la evaluación realizada por la DHS: “En el 2015, la violencia (de ciudadanos soberanos) se producirá con mayor frecuencia durante los encuentros policiales de rutina en la casa de un sospechoso, durante retenes que hacen los agentes del orden público y en las oficinas gubernamentales”.
El informe añade que durante el próximo año “los agentes del orden público seguirán siendo el blanco principal de la violencia (por parte de ciudadanos soberanos)”, debido a su función de aplicar físicamente las leyes y reglamentos”.
La Casa Blanca ha rechazado las críticas en los últimos días por su renuencia a decir las palabras “extremismo islamista”, inclusive cuando la conferencia de esta semana se enfocó casi exclusivamente en ayudar a los imanes y a los grupos comunitarios para contrarrestar el atractivo de grupos como ISIS.
La conferencia de la Casa Blanca no se enfocó en lo más mínimo en la amenaza terrorista interna que representan los ciudadanos soberanos, milicias y otros terroristas antigubernamentales que han realizado con éxito varios ataques en los últimos años.
Un funcionario del gobierno dijo que la Casa Blanca se enfoca en la amenaza de todos los terroristas, incluso de ciudadanos soberanos y otros grupos internos.
“No creo que sea justo decir que la conferencia (de la Casa Blanca) no se refirió a esto en absoluto”, dijo el funcionario, agregando que el presidente Barack Obama hizo referencia a la necesidad de combatir las “ideologías violentas”” de todo tipo.
Un funcionario del Departamento de Justicia, la cual dirige el esfuerzo de contra radicalización de la administración, dice que muchas de las tácticas para contrarrestar el reclutamiento radical islámico de los jóvenes también se pueden utilizar para luchar contra los grupos extremistas antigubernamentales.
Mientras que grupos como ISIS y Al Qaeda captan la mayor atención, para muchos policías locales, el peligro está más cerca de casa.
En una encuesta realizada el año pasado a agentes del orden público, tanto estatales como locales, ellos mencionan que la principal amenaza terrorista interna —más que la de los islamistas extranjeros— es la que representan los terroristas ciudadanos soberanos y los grupos de milicia a nivel nacional.
La encuesta fue parte de un estudio realizado por el Consorcio Nacional para el Estudio del Terrorismo y Respuestas al Terrorismo de la Universidad de Maryland.
En 2013 un hombre que tenía puntos de vista antigubernamentales llevó a cabo un ataque en el que le disparó a tres empleados de la Administración de Seguridad del Transporte (TSA, por sus siglas en inglés) en el aeropuerto de Los Ángeles, matando a uno de los agentes. El año pasado, una pareja mató a dos policías y a un transeúnte en una tienda de Walmart en Las Vegas.
Mark Potok, investigador principal del Southern Poverty Law Center, dijo que, según algunas estimaciones, existen hasta 300.000 personas involucradas de alguna manera en el extremismo de ciudadanos soberanos. Quizá, alrededor de 100.000 personas forman un núcleo del movimiento, dijo.
El enfoque del gobierno federal en los grupos internos fluctúa, dijo Potok, en parte debido a la amenaza de grupos extranjeros como al Qaeda y sus afiliados.
Potok dice que los grupos de ciudadanos soberanos han suscitado el apoyo debido a las malas condiciones económicas. Algunos grupos viajan por el país dando a conocer su ideología como una manera de ayudar a los propietarios a librarse de la ejecución hipotecaria o salir de la deuda, simplemente pasando por alto los tribunales y las leyes de bancarrota.
El enfoque del informe del DHS en los terroristas de extrema derecha es un tema que cosechó controversia política para la administración de Obama en el pasado. En 2009, un informe del DHS en relación a que los grupos de milicia derechistas probablemente estaban reclutando a veteranos militares provocó una protesta entre los grupos de veteranos.
El informe fue elaborado por el personal durante el gobierno de Bush, pero no fue publicado sino hasta que Janet Napolitano tomara posesión como secretaria de Seguridad Nacional. Napolitano criticó a su propia agencia por el informe.