Por Ed Payne
(CNN) – Hace unas semanas, el general Beauregard Lee, la marmota residente del área metropolitana de Atlanta fue alabada por la ciudad, cuando predijo la llegada temprana de la primavera para el Sur de Estados Unidos.
Pues será mejor que Beau se revise los ojos porque lo que se siente en esta parte del país no se parece mucho a la primavera. Luce como un desastre mayor.
Este miércoles, otro sistema de tormentas correrá a través de algunas partes del sur. Es el cuarto sistema similar de las últimas dos semanas, y la gente ya se está hartando. La marmota es vista ahora como un bicho non grato.
“El Gen. Beauregard no dice la verdad,” tuiteó Robert Wilson. “Deberían de emitir una orden de arresto en su contra por declaraciones falsas.”
Nunca más
Por supuesto, la definición de un sureño de una tormenta de invierno es un poco diferente a la de sus primos del norte.
Lo que podría pasar por una ligera capa de polvo en Minneapolis o Boston puede paralizar una ciudad como Atlanta. Hace poco más de un año, sólo unos cuantos centímetros de nieve y hielo y la mala preparación del Departamento de Transporte dejaron una ciudad en estado de paralización.
Funcionarios locales y estatales fueron muy criticados por su respuesta a la tormenta de enero del 2014 que se convirtió en una pesadilla de tráfico y dejó a algunos automovilistas varados durante 18 horas o más.
Los funcionarios prometieron que nunca más. Y no están dejando nada al azar.
El gobernador de Georgia, Nathan Deal, ordenó que las oficinas del gobierno estatal en 50 condados del norte cierren y declaró el estado de emergencia para la preparación para desastres, que entra en vigor al mediodía.
El gobernador de Tennessee - donde se han reportado 30 muertes relacionadas con el mal clima en los últimos nueve días - y el gobernador de Alabama también declararon estados de emergencia. Carolina del Norte está dispuesta a hacer lo mismo.
Alerta de tormenta invernal en 11 estados
En total 11 estados tienen advertencias de tormenta de nieve, hielo, aguanieve y lluvia helada razón por la cual las escuelas están cerradas, y los pasillos del pan y la leche pasillos están vacíos en los supermercados.
La trayectoria de la tormenta va en una línea desde Texas hasta la costa de Carolina, aunque su impacto no será necesariamente parejo - pues unos pocos kilómetros de aquí a allá podrían significar una diferencia entre un aguacero, una nevada apocalíptica o algo intermedio .
En Tennessee, por ejemplo, se pronostica que Memphis y Nashville tendrán algo así como cinco centímetros de nieve. Luego está Chattanooga, en la esquina sureste del estado, donde uno puede esperar de siete a 18 centímetros.
Atlanta debe recibir sólo cuantos centímetros, aunque si se traslada unos 30 kilómetros al norte, a Roswell, se encontrará casi el doble.
Carolina del Norte puede esperar más nieve, con 12 y hasta 22 centímetros para ciudades como Charlotte y Raleigh .
La nieve no es la única preocupación para el Sur. Aguanieve y lluvia, incluso a veces pueden ser tan desgastantes como lo han demostrado las tormentas anteriores.
“Uno nunca se acostumbra a una tormenta de hielo”, dijo el meteorólogo de CNN Chad Myers. “No hay nada que usted pueda hacer en una tormenta de hielo cuando realmente llueve sobre una superficie que está por debajo de la congelación. No se puede conducir así, incluso caminar es difícil y las maniobras son imposibles.”
Una cuestión de perspectiva
Aquellos que planean volar desde y hacia el sur están pendientes en caso de que sus vuelos sean cancelados con el teléfono a la mano para reprogramar el viaje pues eso ya ha pasado.
Hasta antes de las 9 de la mañana, el sitio web de seguimiento de los viajes aéreos FlightAware daba cuenta de ya casi 1.000 cancelaciones para este miércoles, dentro y fuera de los Estados Unidos.
Su lista de los aeropuertos más afectados tiene un acento propio del sur, con dos en Dallas (DFW y Love Field, que estaban en el medio del fango invernal) entre los cuatro más afectados. Atlanta Hartsfield-Jackson encabezaba cualquiera de los lugares reportados con el 19% de sus vuelos cancelados, lo que podría tener consecuencias de largo alcance, dada su posición como el aeropuerto más concurrido del mundo.
Por supuesto, los dolores de cabeza por la nieve y los viajes no son nada nuevo para los del norte, especialmente este invierno. La gente allá encontró una fuente viva para el humor sobre la difícil situación en el sur.
“En Wisconsin, a esto lo llamamos ‘miércoles’”, bromeó Craig Koplien.
Tal vez cuando todo está dicho y hecho, es la marmota la que ríe al último. ¿Alguien se molestó en confirmar sus habilidades para pronosticar el clima?