(CNN) — Los niños recogepelotas —y adultos que hacen el mismo trabajo— son héroes silenciosos en los torneos de tenis.
Además de recoger y repartir pelotas, entre otras cosas, facilitan toallas a los jugadores, sostienen paraguas durante los cambios en partidos con calor y remueven las fundas de plástico de las nuevas raquetas de tenis.
La mayoría de las veces, no reciben pago.
Uno de los ball boy, sin embargo, quedó atrapado en un intercambio de palabras el domingo durante la final del Abierto de Miami entre Novak Djokovic y Andy Murray, lo que asustó al menor y provocó que Nole le extendiera una disculpa pública.
Luego de que Djokovic perdiera el segundo set, el tenista número uno del mundo le gritó a su equipo al tiempo que le arrebató la toalla al ball boy, que al parecer se asustó por la acción y se alejó del tenista.
Djokovic recibió una advertencia del juez Damien Dumusois por la manera en como le gritó a su equipo —no por la manera en como agarró la toalla— antes de que recobrara su postura y venciera a Murray en tres sets 7-6 (3) 4-6 6-0.
El tenista de Serbia aprovechó una publicación en su página de Facebook para disculparse con el ball boy en un mensaje de video.
“Ha sido probablemente el mejor inicio de una temporada en mi carrera además de la de 2011, y no puedo estar más agradecido por todo el apoyo que estoy obteniendo de mis fanáticos, estoy disfrutando mi tiempo jugando y compitiendo y espero que haya puesto una sonrisa en sus rostros”, dijo Djokovic, que comenzó su temporada en 2011 con una marca de 41 victorias seguidas.
“También, quiero reflexionar sobre un mal momento que ocurrió en la final contra Andy (Murray) cuando perdí el segundo set. Le grité a mi equipo como signo de frustración”, añadió.