(CNN) — Una combinación de tres medicamentos para el VIH funciona de manera formidable en la lucha contra el ébola en el laboratorio, de acuerdo con la investigación presentada el 1 de mayo por la Asociación Canadiense de Investigación del VIH.
Si las medicinas funcionan en humanos –y ese es un gran si– sería un cambio de jugada en la lucha contra el ébola. Las medicinas para el VIH son prácticamente baratas y disponibles en África Occidental, donde más de 10,000 personas han muerto por causa del brote de ébola.
“Si funciona, estaremos haciendo marometas –si supiera cómo hacer una– por los pasillos”, dijo uno de los investigadores, el médico Donald Branch, profesor asociado en el departamento de medicina de laboratorio y patobiología de la Universidad de Toronto.
Los investigadores decidieron tomar el experimento después de leer una nota de CNN del otoño pasado sobre el Dr. Gorbee Logan, un médico de Liberia que dijo haber tratado a 15 pacientes de ébola con lamivudine, un antirretroviral utilizado contra el VIH. De ellos, 13 sobrevivieron.
La Universidad de Toronto utilizó los antiretrovirales lamivudina, AZT y tenofovir en el laboratorio. Cada uno fue efectivo contra el ébola individualmente, pero la combinación de los tres funcionó mejor, reduciendo el ritmo de replicación en un 88%.
“Cuando vi los resultados, le pedí a uno de mis colegas que tomara una foto, porque pensé: ‘¡Acabamos de hacer historia!’”, dijo StephenMcCarthy, uno de los alumnos doctorales de Branch.
Pero la Organización Mundial de la Salud (OMS) y el Instituto Nacional de Salud en Estados Unidos (NIH por sus siglas en inglés) no son tan entusiastas.
En primer lugar, los investigadores de la Universidad de Toronto no usaron el virus real del ébola, sino una versión modificada que no infecta a humanos. Ellos desean tener acceso a un laboratorio de nivel 4 de bioseguridad en donde está permitido trabajar con el virus activo.
“Estos estudios son interesantes, pero aún preliminares”, dijo el Dr. Anthony Fauci, director del Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas del Instituto Nacional de Salud. “Sería importante repetirlos con el virus activo del ébola, bajo las condiciones de seguridad apropiadas”.
Tras leer la nota de CNN sobre Logan, los investigadores del Instituto Nacional de Salud experimentaron con una de las tres medicinas en el estudio canadiense, lamivudina, y encontraron que no funcionaba en su laboratorio, confirmando un estudio que habían realizado antes.
Los doctores canadienses cuestionaron los métodos del NIH, por sus siglas en inglés, argumentando que sus científicos no dieron suficiente tiempo para que se expusiera el virus a la medicina.
Tarik Jasarevik, un vocero para la OMS, dijo que el virus utilizado en la Universidad de Toronto era “artificial” y dijo que hay “poca correlación” entre sus resultados y los resultados encontrados cuando se trabaja con virus vivo.
En noviembre, los investigadores de la Universidad de Toronto enviaron sus resultados sobre las medicinas para el VIH al médico Martin Friede de la OMS. Si bien dicen que nunca recibieron una respuesta directa, al día siguiente Friede declaró en una conferencia de prensa que la información mostraba que el lamivudine “no tiene actividad antiviral en contra [del virus del ébola] y por lo tanto no debería ser administrado para el tratamiento del ébola”.
Pero no todos los doctores en Liberia están haciendo caso. El Dr. Benedict Kolee dijo que le dio lamivudine a tres pacientes con ébola y los tres sobrevivieron, mientras que sin esa medicina la mayoría de los pacientes mueren.
Kolee dijo que él mismo lo tomó después de tratar a un hombre con ébola sin usar equipo de protección. El hombre murió por ébola dos días después. Kolee no se infectó.
Un amigo suyo, otro médico, se infectó tras tratar al mismo paciente. Kolee dice que trató de introducir lamivudine al hospital a escondidas para su amigo, pero el doctor del hospital lo detuvo diciendo que la medicina no estaba permitida.
“Él murió unas horas después, y por la gracia de Dios yo sigo vivo porque tomé lamivudina”, dijo. “Si tuviera un caso de ébola hoy, les daría lamivudine”.
La OMS está investigando diferentes medicinas –pero ninguna ya usada para el VIH– en ensayos clínicos para ver si ayudan a los pacientes con ébola. La mayoría de ellas no son genéricas.
En el estudio reciente, dos de las tres medicinas contra el VIH son genéricas, y la tercera, tenofovir, se espera que esté disponible como genérico a finales de 2017. Las medicinas genéricas no son típicamente tan lucrativas para los fabricantes como las medicinas de laboratorios.
“Quizás el mejor enfoque para el desarrollo de medicamento sería ver todas las alternativas disponibles, y no solo las que tienen gran potencial en el mercado”, dijo Eric Campbell, profesor de medicina en la Escuela de Medicina de Harvard y director de investigación en el Instituto Mongan de Políticas de Salud.