(CNN) – Una fiesta de cumpleaños no terminó tan bien como se esperaba. Tres niños que disfrutaban jugando dentro de una casa inflable en las playas de Fort Lauderdale, Estados Unidos, resultaron heridos luego de que un fuerte viento elevara 15 metros la estructura y la hiciera volar por los aires.
Uno de ellos resultó con heridas graves y se encuentra en el hospital luego de que la misma aterrizara violentamente.
Las autoridades responsabilizaron los fuertes vientos que azotan la región aunque tranquilizaron a los padre de familia diciéndoles que este incidente se trató de un hecho que no es común y que las casas infalibles que se usan para la recreación de los menores no son peligrosos si se siguen las medidas de seguridad.
Pero las lesiones en casas inflables no son raras.
Dos niños en el estado de Nueva York resultaron heridos gravemente el año pasado tras caer casi dos plantas cuando una ráfaga de viento barrió la casa en la que estaban jugando.
Un estudio realizado por el doctor Gary Smith, del Hospital Nacional de Niños en Columbus, Ohio, encontró que el número de lesiones relacionadas con las casas para juegos se elevaron 1,500% desde 1995 hasta 2010.
De 2008 a 2010, la tasa de lesiones se fue al doble, según el estudio, que fue publicado en la revista Pediatrics en 2012.
En 2010, un promedio de 31 niños fueron tratados en salas de emergencia diariamente, según el informe. “Eso es un niño cada 45 minutos”, dijo Smith, quien es el director del Centro de Investigación de Lesiones y Política en el Hospital Nacional de Niños.
Smith dijo que el patrón de las lesiones de casas inflables es similar a las lesiones sufridas por el uso de los trampolines elásticos. Pero mientras que hay directrices nacionales de seguridad para las camas elásticas, no hay ninguno de casas para brincar inflables.
Miriam Falco contribuyó con este reporte.