Joyce Mitchell, la instructora de la sección de sastrería de la prisión, sabía que los dos reclusos habían conspirado para matar a su esposo (CNN).

(CNN) – Su esposa está acusada de ayudar a dos asesinos convictos a escapar de una prisión de Nueva York. Y el plan de escape, dice una fuente, también incluía un complot para matarlo.

Pero, ¿qué tanto sabía Lyle Mitchell?

Esa es una de la multitud de preguntas que los investigadores están haciendo mientras buscan a los dos fugitivos, Richard Matt y David Sweat, en una cacería humana masiva que se amplió el martes.

Una fuente con conocimiento directo de la investigación le dijo a CNN que Joyce Mitchell, la instructora de la sección de sastrería de la prisión, sabía que los dos reclusos habían conspirado para matar a su esposo, por lo que le habló de los planes de ellos para escapar de las instalaciones y le advirtió que su vida podía estar en peligro.

Sin embargo, un abogado que representa a Lyle Mitchell dijo que el esposo quien también trabajaba en el área de confección de la prisión, ignoraba todo esto.

“Él no sabía nada sobre el plan para escapar”, dijo el abogado Peter Dumas.

‘Él está muy confundido’

Hasta este punto, los investigadores no creen que Lyle Mitchell haya estado involucrado en el complot de la fuga, dijo la fuente con conocimiento directo de la investigación.

El martes, Lyle Mitchell estuvo cara a cara con su esposa por primera vez desde su arresto la semana pasada. Ella está acusada de hacer llegar hojas de sierras de arco, cinceles, barrenos, una perforadora y otro tipo de contrabando a manos de los convictos antes de que se fugaran.

Durante una hora, la pareja pasó hablando por un teléfono, separados por un cristal, y su conversación fue privada y sin supervisión, dijo el alguacil del condado de Clinton, David Favro.

Lyle Mitchell se mostró comprensivo y su esposa parecía sentirse consolada por su visita… la primera que ha tenido desde su arresto, dijo el alguacil.

“Él le está dando apoyo”, dijo Dumas. “Él no planifica testificar a su favor”.

Stephen Johnston, el abogado de Joyce Mitchell, dijo que no sabía sobre qué habían hablado. Él describió el estado de ánimo de su clienta como “angustiada, muy emotiva y muy alterada”.

Dumas dijo que Lyle Mitchell también está luchando por hacerle frente a lo que ha pasado y al hecho de enterarse de que “posiblemente había un plan para hacerle algún daño a él”.

“Él está muy confundido. Simplemente es demasiado para que pueda asimilarlo”, dijo Dumas. “Hasta cierto punto está tambaleando”.

El fiscal de distrito del condado de Clinton, Andrew Wylie, no ha comentado mucho sobre el esposo, aparte de decir que está bajo investigación.

Los investigadores están estudiando a otros empleados de la prisión también y no han descartado que ellos pueden haber tenido que ver en la fuga, dijo la fuente con conocimiento de la investigación.

Relaciones bajo escrutinio

Las autoridades también están investigando si otros reclusos podrían haber ayudado a crear algún tipo de entretenimiento antes, durante o después de que Matt y Sweat escaparon, dijo la fuente.

Joyce Mitchell se ha declarado no culpable de los dos cargos presentados en su contra y ha estado hablando con las autoridades. Si es declarada culpable, podría enfrentar hasta ocho años tras las rejas.

Las autoridades están investigando si los dos reclusos amenazaron a Mitchell para obligarla a ayudarlos, le dijo a CNN el oficial estatal de Nueva York. Los investigadores creen que Mitchell empezó a echarse para atrás en cuanto a la ejecución del plan pero que posiblemente había estado de acuerdo con proveerles un auto para que huyeran debido a las amenazas en contra suya y de su esposo, dijo el oficial.

Pero su relación con los reclusos lleva años, dijeron las autoridades.

En el pasado, ella había sido investigada por una relación inapropiada con Sweat, la cual llevó a los funcionarios de prisiones a sacarlo de la sección de sastrería en el 2013 para mantenerlos separados, dijo Wylie, el fiscal de distrito.

Ese fue el año en el que ella empezó a tener relaciones sexuales con Matt, dijo la fuente.

La relación sexual tuvo lugar en la sección de sastrería en las instalaciones del Centro Correccional del condado de Clinton, el único lugar que se conoce en donde ellos hayan estado juntos, dijo la fuente.

Se extiende el área de búsqueda

Ya que son pocas las pistas que apuntan hacia dónde podrían haberse dirigido Matt y Sweat después de fugarse, los investigadores están cambiando de dirección.

El miércoles la búsqueda se prolongó hasta un doceavo día. El área que cientos de agentes de la ley están peinando se está extendiendo, dijo la Policía del estado de Nueva York la noche del martes.

Los equipos serán reasignados a nuevas zonas cercanas a la prisión en Dannemora, Nueva York, dijo la policía, al explicar que el cambio en la zona de búsqueda se basó en información que hasta el momento se ha descubierto durante la búsqueda de los fugitivos.

Más de 800 funcionarios locales, estatales y federales han estado peinando los densos bosques y los pequeños pueblos de la zona. Las unidades caninas siguen buscando un olor que pueda llevar a la policía hasta Matt y Sweat, quienes escaparon el 6 de junio de las instalaciones de máxima seguridad, conocidas como “la pequeña Siberia” en el estado de Nueva York.

Vermont y Canadá están entre los escenarios

Pero después de que algunas pistas prometedoras no tuvieran éxito, los oficiales ni siquiera están seguros de que estén buscando en el lugar correcto.

Los fugitivos podrían haber logrado atravesar el lago Champlain hasta Vermont, y el gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, ha dicho que habló con su homólogo allí para discutir a fondo un “acuerdo de cooperación” para la búsqueda.

Otra posibilidad es Canadá, cuya frontera se encuentra a tan solo un poco más de 32 kilómetros al norte de la prisión.

Pero Jonathan Gilliam, un exagente del FBI que ha dirigido cacerías humanas, dice que los asesinos no intentarían conducir a través de puestos de control fronterizos… y caminar a través de los espesos bosques es aun más difícil.

“Es un ambiente un poco hostil, frío por la noche”, le dijo a CNN. “Se estarían exponiendo al instante a que los atraparan”.

¿Se estarán refugiando en una cabaña?

Los investigadores están recorriendo partes de las montañas de Adirondack al norte del estado de Nueva York, una zona de seis millones de hectáreas a las puertas de la prisión.

La zona está llena de cientos de cabañas, muchas de ellas abandonadas en la temporada baja.

Los investigadores piensan que Matt y Sweat podrían estar refugiándose en una de ellas. También advierten que el par de fugitivos podría invadir una casa y tomar rehenes.

Pero Gilliam dice que correrían “un riesgo muy grande”.

“Si haces eso, aunque salgas de allí, habrás dejado una huella que la policía puede aprovechar”, dijo.

Un auto les daría la oportunidad de tener las grandes ciudades a su alcance

Según las autoridades, Joyce Mitchell dice que Matt y Sweat le dijeron que planificaban conducir hasta un destino no especificado a una distancia aproximada de siete horas.

Ella se echó para atrás del plan de fuga y no está claro qué otras opciones tenían en mente los asesinos. Pero conducir durante ese tiempo a una velocidad promedio de 96,6 kph pondría a grandes ciudades como Boston, Nueva York y Filadelfia a su alcance.

Sería más fácil que esos ambientes los ayudaran a desaparecer.

En los pueblos pequeños, “las personas están muy conscientes de quiénes están a su alrededor”, dijo Gilliam. “Ellas están muy conscientes de lo que otras personas están haciendo. En el momento en que entras en una ciudad más grande, las personas simplemente dejan de prestar atención”.

Vínculos de uno de los asesinos con México

Aún más lejos se encuentra México, una posibilidad mencionada por Cuomo durante el fin de semana.

El país, a unos 3.219 kilómetros de distancia, aparece en el pasado de Matt.

En 1997, él asesinó brutalmente a un hombre cerca de Búfalo, Nueva York, y luego huyó a México, donde mató a otro hombre antes de ser capturado.

Según la policía, tenía tatuada la frase “México Forever” en su espalda.

La cacería humana pone presión sobre los recursos

Las autoridades están ofreciendo una recompensa de 100.000 dólares por información que conduzca a los arrestos de los presos que se fugaron.

No está claro cuánto dinero se ha gastado, pero a juzgar por todas las tropas en el lugar, esto no puede ser barato.

Según la Policía del estado de Nueva York, ellos han planificado 1.200 iniciativas. Pero hasta el momento, no está claro si alguna de ellas dará resultado.

Y el tiempo, cada vez más, puede estar a favor de ellos.

“No se puede mantener este tipo de cacería humana por mucho tiempo”, dijo Gilliam. “Sencillamente acapara demasiado de todos los demás recursos disponibles”.

Polo Sandoval, Alexandra Campo, Eliott C. McLaughlin, Carolyn Sung, Shimon Prokupecz, Chris Welch, Carolyn Sung y Danelle García contribuyeron con este reporte.