(CNN) - Explosivos escondidos dentro de una almohada fueron detonados afuera de una escuela del sur de Afganistán. La explosión mató a tres niños e hirió a otras seis personas, informó la policía.
Los niños asesinados jugaban afuera de su escuela en Kandahar. La bomba fue colocada en una pared del centro escolar, dijo Ahmad Zia Durrani, vocero de la policía provincial.
El incidente ocurrió en una escuela islámica, que tiene residencias donde los estudiantes duermen.
No estaba inmediatamente claro quién estaba detrás del atentado o quién era el objetivo de la agresión.
Aún así, tal derramamiento de sangre es demasiado común en Afganistán.
Por años, esa nación ha sido castigada por la violencia.
Una invasión liderada por Estados Unidos, tras los atentados del 11 de septiembre de 2001, ayudó a expulsar a los talibanes del poder, aunque no eliminó al grupo - que se ha cobrado el crédito de numerosos ataques, incluyendo un atentado suicida el martes dirigido a las fuerzas internacionales en Kabul.