(CNN Español) – Las autoridades de Colombia recapturaron este jueves a un violador de menores confeso que se había fugado en las últimas horas de su prisión domiciliaria, según confirmó el director de la Policía de Colombia, general Rodolfo Palomino.
Se trata de Byron Palacio Fernández, un hombre de 49 años acusado por la violación de cuatro menores de edad de la ciudad de Barranquilla, en la costa norte de Colombia, y que había sido condenado 15 años de prisión en 2012 por los crímenes contra los pequeños. Palacio, además, había sido condenado al menos cinco veces antes por delitos de la misma naturaleza.
El jueves el hombre fue recapturado en el municipio de Maicao, Guajira —en la frontera con Venezuela—, donde al parecer pretendía huir del país, según comunicó la policía de ese país.
Prisión domiciliaria tras un historial de condenas
El hombre había sido enviado a la penitenciaría de El Bosque, en Barranquilla, pero una jueza de ejecución de penas de la ciudad de Sincelejo le concedió el beneficio de ir a su casa a pagar la condena el pasado 2 de marzo, según reportó el diario local El Heraldo.
Según ese medio, al hombre le dieron esta opción por sufrir de una tuberculosis resistente a los medicamentos y la jueza del caso consideró que “el Monstruo de la Sierrita” —como es conocido el violador— no representa un peligro para la sociedad.
Los crímenes por los que se le acusa en su última condena fueron cometidos entre 2007 y 2008.
Pero Palacio ya había sido condenado en octubre de 1995, febrero de 1998, septiembre de 2002, enero de 2010 y agosto de 2010 por diferentes jueces penales de los circuitos de Cúcuta y Barranquilla, según información de la Defensoría del Pueblo, entidad que rechazó el beneficio de prisión domiciliaria.
“Para la Defensoría es evidente que ante las condenas, que al sumarse equivalen a una sentencia superior a los 58 años de prisión, Palacio Fernández constituye un peligro para la sociedad y particularmente para los niños, niñas y adolescentes”, dijo la organismo en un comunicado.
Le daba miedo salir
Palacio recuperó la libertad por “cuestiones de procedimiento”, según un reporte de la Fiscalía General de ese año.
El hombre fue capturado de nuevo en diciembre de 2008, luego de reincidir en los actos de violación.
En ese entonces Palacio Fernández dijo que no quería salir porque tenía miedo de reincidir en su conducta violenta contra niños.
“Me daba pánico salir a las calles de Barranquilla nuevamente porque sentía que iba volver a violar niños”, dijo y añadió que “es una fuerza interna que me obliga a hacerlo. Yo le pedía a Dios que me diera fuerzas, pero me dieron la libertad y vea lo que está sucediendo”, dijo esa vez a los investigadores mientras era esposado y enviado de nuevo a la cárcel, según El Heraldo.
No tenía brazalete electrónico
El director del Instituto Nacional Penitenciario de Colombia (INPEC), el brigadier General Jorge Luis Ramírez Aragón, aseguró a medios colombianos que el violador no tenía brazalete electrónico en su detención domiciliaria por la orden de la jueza.
Una fuente del INPEC le explicó a CNN que la jueza fue quien determinó que el reo no debía llevar este artefacto de vigilancia para verificar el cumplimiento de la pena al interior de su casa, y que a esa institución le corresponde cumplir con las órdenes de los jueces.
La Policía de Colombia había anunciado una recompensa por 10 millones de pesos por información que diera con el paradero de este delincuente.
Entre tanto, Cristina Plazas, directora del Instituto Nacional de Bienestar Familiar (ICBF), que vela por la seguridad y el cumplimiento de los derechos de los menores de edad en Colombia, alertó que en Colombia se les está otorgando libertades a los violadores de menores y pidió la pena máxima para estos delincuentes.
“Hoy existe un criminal en la calle que pone en riesgo la vida de los menores de edad y ni siquiera se impuso la medida de brazalete. [A los criminales] se les debe aplicar la máxima pena y deben cumplirla en su totalidad en una cárcel”, expresó Plazas a través de un comunicado del ICBF.