(CNN) - Al menos dos personas han muerto y varias más están heridas a consecuencia del paso del supertifón Koppu por el norte de Filipinas.
Las autoridades de defensa civil de país confirmaron los fallecimientos. Una mujer de unos 61 años murió cuando una pared de su casa se vino abajo, y un adolescente perdió la vida cuando un árbol se desplomó sobre él y otras cuatro personas que resultaron lesionadas.
La fuerza del tifón obligó a cientos de miles a dejar sus casas por los fuertes vientos y las lluvias que está descargando el meteoro sobre una vasta zona poblada sobre todo por gente pobre, en Luzón, la principal isla de las Filipinas.
El cazador de tormentas James Reynolds le dijo a CNN, desde el pueblo de Maddela, que durante la madrugada del domingo se registraron lluvias torrenciales y el supertifón golpeó la zona con vientos extremadamente fuertes.
Varios pueblos de la provincia de Aurora están incomunicados por las inundaciones y los deslizamientos de tierra.
“De acuerdo a los reportes del Ejército de Filipinas, hay muchas casas destruidas y árboles arrancados de raíz en tres pueblos”, informó la oficial Agencia de Noticias de Filipinas.
Las autoridades advirtieron que una vasta zona del archipiélago podría enfrentar un período de tres días de las inundaciones y deslizamientos de tierra.
El servicio meteorológico del país, PAGASA, advirtió de probables daños significativos a los edificaciones cerca del centro del supertifón, pues el nivel de las inundaciones podrían llegar hasta los tres metros por sus incesantes tormentas.