(CNN) - El 25 de marzo del 2003, el primer teniente Brian Chontosh y su pelotón pasaron por una emboscada de morteros, granadas propulsadas por cohetes y armas de fuego automáticas mientras transitaban por una carretera hacia Bagdad.
Al darse cuenta de que la ruta estaba bloqueada y con una artillería pesada, Chontosh le ordenó a su vehículo que se dirigiera directamente hasta la ubicación del enemigo.
Según la mención honorífica de su Cruz de la Armada, Chontosh salió del vehículo y comenzó a entablar un combate con el enemigo con su rifle y su pistola. El descargó sus municiones en varias ocasiones, pero aun así seguía presionando con el fin de lograr que las armas enemigas se descargarán, hasta que finalmente logró que su pelotón atravesara la emboscada.
“Al culminar su audaz ataque, había despejado más de 200 metros de la trinchera del enemigo, matando a más de 20 enemigos e hiriendo a muchos otros”, lee la mención de la Cruz de la Armada de Chontosh.
Han transcurrido varios años desde que Chontosh regresó a casa desde Iraq, pero en el Capitolio continúa el debate en cuanto a si él y algunos otros soldados estadounidenses que prestaron servicio en la Operación Libertad Iraquí, merecen ser tomados en cuenta para la Medalla de Honor del Congreso.
La Medalla de Honor es el reconocimiento militar de mayor jerarquía en la nación, la cual representa actos de valor extraordinarios. Sin embargo, hasta ahora ningún veterano sobreviviente de la guerra en Iraq ha obtenido la medalla y solo cuatro han recibido el reconocimiento post mortem, y algunos de los que estuvieron en el conflicto se preguntan el motivo.
La Segunda Guerra Mundial, así como la guerra de Corea y Vietnam, dieron lugar a cientos de Medallas de Honor: 472, 146 y 258, respectivamente. Doce Medallas de Honor han sido otorgadas a veteranos de la guerra en Afganistán y la 13a. será otorgada el jueves.
El senador republicano por California, Duncan Hunter, sostiene que las acciones de varios veteranos de Iraq también merecen el distinguido reconocimiento. Hunter escribió cartas al entonces secretario de Defensa, Robert Gates, solicitando que los veteranos de guerra de Iraq, entre ellos Chontosh, fueran tomados en cuenta para recibir la Medalla de Honor, pero no obtuvo respuesta.
“El hecho de que no haya un solo beneficiario sobreviviente de la Medalla de Honor por los méritos de la guerra en Iraq es un misterio”, dijo Hunter.
“Existen innumerables ejemplos de valor extremo en combate intenso y reñido, pero por algún motivo, a partir de la administración de George W. Bush, ha habido un esfuerzo concertado para no reconocer los actos de valor con la Medalla de Honor”, dijo.
Durante una entrevista con Barbara Starr de CNN, Gates dijo que el hecho que se haya reducido el número de medallas otorgadas refleja un cambio en la forma de hacer la guerra.
“Creo que parte de la razón es la naturaleza de la guerra actualmente, en el sentido de que nuestros enemigos por lo general utilizan armas a cierta distancia de nosotros. Por lo tanto, hay menos combate cuerpo a cuerpo, o combate cercano, en comparación a cómo ocurría en las guerras anteriores”, dijo Gates, al referirse al tipo de acciones que tradicionalmente eran objeto de reconocimiento en conflictos anteriores.
Hunter, quien prestó servicio en Iraq y Afganistán, rechazó rotundamente este razonamiento.
“Afirmar que no existe ningún acto de valor que cumpla con los requerimientos para la Medalla de Honor es un verdadero perjuicio contra todos aquellos en servicio que pelearon y se sacrificaron”, dijo Hunter.
Según los estándares militares, la Medalla de Honor es otorgada a un individuo que haya mostrada una profunda “valentía personal” que vaya “más allá del cumplimiento del deber” y que “haya implicado estar en riesgo de muerte” durante un conflicto contra un enemigo de Estados Unidos.
“Este es un proceso que se ha politizado demasiado y aunque esta administración ha ido más allá para reconocer al menos los actos de coraje en Afganistán, ningún sobreviviente de Iraq ha recibido la misma y definitivamente no es porque no los haya”, dijo Hunter.
El año pasado, el entonces secretario de Defensa, Chuck Hagel, inició una evaluación minuciosa del proceso de medallas de reconocimiento, que se espera sea culminada por su sucesor, Ashton Carter.
Sin embargo, muchos veteranos de guerra de Iraq dicen que no miden ni comparan guerras basadas en el número de medallas y consideran la Medalla de Honor como un reconocimiento individual del más alto nivel de heroísmo.
“No existe una ‘cuota de conflicto’ para otorgar las medallas”, dijo el sargento Thomas Barnes, un veterano del Cuerpo de Marines que sirvió en la provincia de Ambar en Iraq, en el 2009. “A los elementos del comando les preocupa cumplir con los objetivos de la misión, y todo lo demás es secundario”.
“Reconocemos la excelencia cuando la vemos y si a nadie se le otorga un premio en particular, entonces simplemente no se cumplió con los estándares”, dijo Barnes, lo que refleja cómo se sienten muchos de sus compañeros del Cuerpo de Marines y soldados en Iraq en relación al más alto honor militar de la nación.
“Solo porque un miembro del servicio actúa heroicamente, no significa que merezca la Medalla de Honor del Congreso”, dijo.
En lugar de enfocarse en que se rinda a homenaje a los veteranos de guerra, Bill Rausch, exmayor del Ejército que sirvió en Iraq, dijo que la comunidad de veteranos valora el desinterés demostrado por aquellos que son reconocidos y el ejemplo que establece su heroísmo.
“Independientemente de la experiencia de un individuo con o sin uniforme, la Medalla de Honor simboliza la fidelidad hacia los valores militares y el hecho de estar dispuesto a poner su vida en peligro por algo en lo que creen”, dijo Rausch, actual director político de los Veteranos de Iraq y Afganistán de Estados Unidos, una organización de veteranos de las guerras en Iraq y Afganistán.
Sin embargo, agregó que estaría feliz de que no se concedan más medallas, a pesar de su profundo significado.
“A todos nos gustaría ver que se dejen de otorgar Medallas de Honor porque eso significaría que ya no volveríamos a estar en guerra”, dijo Rausch.