Cao Yuehua y Wang Deyi el día que se casaron en 1945  y en 2015.

(CNN) – Una pareja de abuelitos chinos ha celebrado su aniversario número 70 recreando el día de su boda exactamente en el mismo lugar.

Cao Yuehua se casó con su novia Wang Deyi el 24 de noviembre de 1945 en Northern Hot Springs Park, a orillas del río Jialing en Chongqing, al sudeste de China.

La semana pasada, sus cuatro hijos los ayudaron a recrear el día, el cual fue completado con un vestido de novia, velo y una flor grande que se prende con alfiler para el novio.

Cao Yuehua, a la izquierda, y Wang Deyi cuando eran jóvenes amantes en China.

“Han estado juntos durante mucho tiempo, durante la guerra, la agitación política y las enfermedades, y aún pueden estar juntos y amarse. Queremos ayudarlos a conmemorar su amor”, le dijo a CNN su hijo más joven Cao Pangpei, de 60 años de edad.

Amor joven

Wang y Cao se conocieron en 1943 en Kunming, provincia de Yunnan, en un baile organizado por la Universidad Nacional Asociada del Sudoeste, el cual fue organizado por empleados y estudiantes de las más prestigiosas instituciones educativas de China que evacuaron las áreas ocupadas por el enemigo durante la Segunda Guerra Mundial.

Wang, a la izquierda, y Cao, a la derecha, ambos asistieron a prestigiosas universidades de China.

“Mi padre invitó a bailar a mi madre y se enamoraron casi a primera vista. Eso fue todo. Así fue como mi padre conoció a mi madre”, dijo su hijo más joven, Cao, quien ha estado documentando las memorias de sus padres.

Durante la Segunda Guerra Mundial, Cao fue enviado al frente de batalla en la India, para actuar como intérprete para el general del Ejército de Estados Unidos, Joseph Stilwell, dijo Cao.

La directriz era tan urgente que no tuvo tiempo de siquiera dejarle un mensaje a Wang. Cuando se dirigía al aeropuerto, sentado en el camión militar, vio a un amigo en común de su amada y solo le pudo gritar al amigo: “Dile a Wang Deyi que voy rumbo a la India”.

“Él era un intérprete, no un soldado. Sin duda, él estaba asustado por las balas y las bombas en el verdadero campo de batalla”, dijo Cao. “Él le dijo a mi mamá que ella fue la primera que le vino a la mente cuando desesperadamente se agachaba en las trincheras húmedas”.

La única manera en que podían mantenerse en contacto era a través del servicio de correo militar.

Cao visto aquí en su uniforme militar durante la Segunda Guerra Mundial.

La primera carta que Cao le envió a Wang era una foto de sí mismo, un joven oficial en uniforme. Wang la guardó como un tesoro hasta la Revolución Cultural a finales de 1960, cuando tuvo que destruirla porque en ella Cao aparecía con uniforme militar estadounidense. También se enviaron poemas de amor en inglés uno a otro.

‘Mi querida, estoy de vuelta’

Al final de la guerra en Asia en agosto de 1945, la pareja se reunió en la estación de ferrocarril de Kunming, luego de más de un año de estar separados. Fue entonces cuando Cao le propuso matrimonio a Wang con un anillo de rubí que compró en Birmania, y le dijo: “Mi querida, estoy de vuelta”.

A lo largo de los años, sus cuatro hijos los han motivado para que hagan algo que registre su amor.

Cuando la pareja se retiró, volvieron a visitar los lugares en los que habían estado y las universidades en las que habían estudiado. En sus “bodas de oro” en el 2005, sus hijos los llevaron al mismo lugar donde se casaron y celebraron juntos.

Wang y Cao regresaron al lugar en el que se casaron en el 2005 y en el 2015.

“Han estado juntos durante tanto tiempo y el amor no se apaga. Su relación es tan fuerte que incluso en el momento más oscuro durante la Revolución Cultural, cuando mi papá estuvo segregado para enfrentar juicio por su servicio para el Ejército de Estados Unidos, ellos confiaban uno en el otro y se apoyaron mutuamente para superar las adversidades”, dijo Cao.

Cao quiere que más gente conozca la historia de sus padres, como un ejemplo de cómo el amor puede superar la adversidad, y como un marcador de la historia moderna de China.

“Este año mis padres cumplieron 98 años. Actualmente, ellos apenas pueden recordar muchas cosas de sus vidas, pero pueden recitar los poemas de amor que ellos se escribieron el uno al otro, durante el tiempo de guerra”, dijo.

Wang, de 98 años, y Cao, de 97 años, tienen programado revivir su boda otra vez al cumplir los 100 años.