(CNNMoney) – La Reserva Federal elevó sus tasas de interés por primera vez en casi una década. Para algunos países, eso va a doler.
Un aumento en las tasas de Estados Unidos tendrá un impacto en la economía global, pero muchos mercados emergentes tienen buenas razones en particular para estar preocupados.
Sus gobiernos y las empresas se endeudaron fuertemente en dólares durante la última década, debido a que las tasas eran muy bajas. Y los inversores estaban dispuestos a invertir dinero en lugares como Turquía, Malasia y América Latina, con la esperanza de obtener un mejor retorno.
Ese flujo se revirtió cuando los mercados comenzaron a prever que la Fed alzaría sus tasas: cerca de un billón de dólares fueron retirados de los mercados emergentes entre julio de 2014 y agosto de 2015.
Y estos ya están resintiendo la presión de un dólar más fuerte, bajos precios de las materias primas y la desaceleración en China. Estos son tres países con un mayor riesgo:
Brasil
Brasil se encuentra en una profunda crisis económica. Su economía se contrajo 1.7% en el tercer trimestre, su moneda —el real— ha perdido 31% frente al dólar en lo que va de este año, y la inflación está en un máximo de 12 años.
Un alza en las tasas estadounidenses se sumará a las afectaciones. Fanthom Consulting dijo que Brasil es el más vulnerable de todos los mercados emergentes a un despegue de la Fed.
Brasil tiene la segunda mayor deuda en dólares en el mundo, después de China, según el Banco de Pagos Internacionales.
Las empresas brasileñas han pedido prestados miles de millones de dólares en la última década, y podrían ser incapaces de pagar esas deudas si el dólar gana más terreno frente al real.
Turquía
Turquía fue uno de los países que se beneficiaron más cuando la Fed recortó las tasas a cerca de cero. Registró una gran afluencia de inversión extranjera y su economía creció 9% en 2010 y 2011. Pero el panorama ha cambiado rápidamente. Este año se espera que la economía crezca en solo 3%.
Turquía sufrirá si el dólar se fortalece aún más, debido a que importa mucho más de lo que exporta. El alza en las tasas estadounidenses podría provocar que las importaciones de Turquía sean mucho más caras.
Standard & Poor’s ha advertido que el sector bancario del país depende demasiado de los préstamos a corto plazo en el extranjero. Y el costo de pagar la enorme deuda externa a corto plazo de Turquía de casi 125,000 millones de dólares, o aproximadamente el 8% del PIB, también se elevaría junto con el dólar.
Sudáfrica
Sudáfrica es otro país que está pagando el precio de endeudarse fuertemente en dólares cuando la moneda era barata.
Según Capital Economics, Sudáfrica tiene una de las más altas exigencias de financiamiento externo en el mundo. Eso significa que sus reservas de divisas son mucho menores que la cantidad que necesita para destinar al pago de su deuda externa y pagar por importaciones. Un dólar más fuerte empeoraría aún más este problema.
Sudáfrica también está sufriendo debido a que su economía depende en gran medida de la minería, que ha sido presionada por los bajos precios de las materias primas.
Otros mercados emergentes
Rusia, Venezuela y Nigeria también dependen de las exportaciones de materias primas para obtener grandes porciones de sus ingresos públicos. Debido a que las materias primas se cotizan en dólares, los precios podrían caer aún más si el dólar se fortalece.
Es probable que también China sienta un impacto, sobre todo porque el gobierno ha comenzado a permitir que el yuan se cotice de forma más libre. Pero a diferencia de la mayoría de los mercados emergentes, el tamaño de China, sus exportaciones y sus enormes reservas de divisas le proporcionan protección contra posibles impactos.