Wasil Amad, de sólo 11 años, lideró una tropa que combatió al Talibán cuando atacaba su provincia natal. Fue reconocido como un héroe por las autoridades locales.

(CNN) – Un niño afgano de 11 años de edad que fue aclamado como héroe el año pasado por luchar contra el Talibán en la provincia de Uruzgan fue asesinado de un tiro por un hombre armado, según le dijo a CNN un portavoz del gobierno. En un comunicado en su sitio web, el Talibán se responsabilizó del asesinato.

Wasil Ahmad era el sobrino de mullah Samad, un prominente comandante de policía de la provincia de Uruzgan, en el sur de Afganistán.

Wasil ganó atención en 2015 cuando ayudó a proteger a su familia de combatientes talibanes que estaban atacando su casa en Khas Uruzgan, según Dost Mohammad Nayab, un portavoz del gobierno de la provincia de Uruzgan.

El periodista Masoud Popalzai de CNN habló con mullah Samad, actual comandante de la policía local afgana en la provincia de Uruzgán y tío de Wasil Ahmad, quien aseguró que tanto él como el padre del menor fueron luchadores talibanes en el pasado, pero en 2012 cambiaron sus lealtades y se unieron a fuerzas del gobierno.

Al año siguiente, el padre de Wasil fue asesinado por el Talibán.

De acuerdo al testimonio de Samad, hace un año el pequeño Wasil le pidió a su tío que le enseñara cómo usar ametralladoras ligeras y pesadas porque quería vengar la muerte de su padre.

Samad le enseñó a su sobrino a manejar morteros de fuego, ametralladoras tipo PK, cohetes y fusiles tipo AK-47. Wasil aprendió rápido, según su tío, y también aprendió como operar teléfonos satelitales y radios de frecuencia VHF.

El verano pasado, el Talibán atacó la provincia de Uruzgan durante 71 días. Durante uno de esos ataques, Samad resultó herido junto a varios de sus hombres. Entonces, Wasil, que sólo era un niño, tomó el comando de sus hombres y los lideró por 43 días hasta el final del acoso Talibán.

Samad dijo que sólo eran 75 personas luchando en contra de cientos de combatientes talibanes. 18 de sus hombres murieron durante el asedio.

Wasil, junto a otros niños, había vuelto recientemente a la escuela en 2015.

Luego de eso Samad, sus hombres y Wasil fueron trasladados a la capital de la provincia. Las autoridades locales los condecoraron y declararon a Samad y a Wasil como héroes.

El niño vivía en Tarin Kot y asistía a una escuela local con la esperanza de unirse a la policía local afgana cuando tuviera la edad apropiada, dijo Nayab. También tenía una profesora privada que iba a su casa y le daba clases de octavo grado.

Su tío lo recuerda como un niño muy talentoso que podía leer y hablar un poco de inglés.

El lunes, cuando Ahmad salió de su casa rumbo a una tienda de abarrotes a comprar cosas para sus hermanos, un hombre armado que se trasportaba en una motocicleta le dio un tiro en la cabeza. El menor fue llevado un hospital provincial, pero este no tenía los equipos necesarios.

El niño fue transferido a un hospital en la vecina provincia de Kandahar pero no logró sobrevivir debido a la gravedad de sus heridas. Dejó a su madre, dos hermanas mayores y tres hermanos menores.

El lunes en la tarde el Talibán publicó un comunicado en su página web atribuyéndose la responsabilidad por la muerte de Ahmad.