(CNNMoney) – Olvídate del petróleo. Es el momento de preocuparte por los bancos.
Las acciones de algunos de los mayores bancos del mundo se están hundiendo. Los títulos financieros del S&P 500 han bajado más de 11% en lo que va de año. Ese es un desempeño peor que el de las acciones petroleras y energéticas, e incluso que el del índice de mercados emergentes. Y los bancos europeos han caído aun más.
Deutsche Bank ha perdido cerca de 31% en lo que va de año, Unicredit ha caído 35%, y Credit Suisse registra una baja de 30%. Barclays, BNP Paribas, Société Générale y UBS han perdido alrededor de 20% desde el comienzo de 2016 hasta la primera semana de febrero.
Las ganancias de los bancos han sido en general decepcionantes. Las acciones de Credit Suisse tocaron un mínimo de 24 años después de que registró su primera pérdida desde 2008, y BNP Paribas sufrió una caída de 50% en su utilidad neta en el cuarto trimestre del año pasado.
Incluso JPMorgan Chase, que tenía un trimestre abundante, advirtió sobre un “desafiante” comienzo de 2016 debido a la volatilidad de los mercados.
Existe un creciente temor sobre el estado de la economía mundial. China se está desacelerando, y la economía estadounidense está perdiendo impulso. Los mercados emergentes están luchando por seguir creciendo, y algunos se han hundido en la recesión.
Los bancos están resultando particularmente afectados. Estas son tres de las causas:
1. Tasas de interés bajas
Los tipos de interés bajas en la mayoría de las grandes economías están reduciendo los márgenes de ganancias de los bancos, y los inversores están perdiendo la esperanza de un cambio en el corto plazo.
La Reserva Federal elevó las tasas por primera vez en casi una década en diciembre pasado, y ha indicado que podrían aumentar cuatro veces este año.
Pero los inversores no lo creen, y los mercados financieros ya están reflejando en sus precios el escenario de cero alzas en 2016.
El Banco de Inglaterra señaló que es posible que las tasas permanezcan en mínimos históricos durante un año más. El Banco de Japón acaba de introducir tasas de interés negativas, y se espera ampliamente que el Banco Central Europeo tome medidas pronto para rebajar aún más las tasas de la zona euro.
“El riesgo de un retroceso de la Fed y de tasas negativas en todos los sectores por parte de los principales bancos centrales no es bueno para el sector”, dijo Mike van Dulken, director de investigación de Accendo Markets.
2. Presiones petroleras
El colapso de los precios del crudo también está pesando sobre el sector financiero. Muchos bancos han hecho grandes inversiones en grandes proyectos petroleros, solo para ver quebrar a las compañías detrás de ellos a medida que los precios colapsan. Al menos 42 compañías petroleras de Norteamérica se han declarado en bancarrota desde comienzos de 2015.
“El declive en los precios del petróleo a niveles en gran medida no previstos marca un gran signo de interrogación sobre todos los préstamos hechos para apoyar la industria en tiempos de bonanza”, dijo Nicholas Colas, director de estrategia de mercado de la correduría ConvergEx.
Wells Fargo, JPMorgan Chase y Citigroup tienen miles de millones de dólares en préstamos al sector energético. Están apartando fondos destinados a cubrir las pérdidas esperadas.
3. Regulaciones y multas
Muchos bancos también siguen luchando con las consecuencias de su mal comportamiento. Las multas y los acuerdos se están acumulando.
Los bancos ahora también enfrentan regulaciones más estrictas, lo cual les obligan a reducir sus negocios de banca de inversión.
Están obligados a apartar más capital para los tiempos difíciles, y se les prohíbe comerciar con su propio dinero: las llamadas operaciones por cuenta propia.
Las nuevas reglas fueron diseñadas para hacer más seguros a los bancos y evitar futuras crisis, pero los bancos dicen que también los están haciendo menos rentables.
BNP Paribas, Credit Suisse, Deutsche Bank y Barclays anunciaron recientemente un alejamiento de la banca de inversión, en un intento por reducir los costos.