(CNN Español) – Bolivia está atenta a la investigación que se realiza tras el ataque contra la alcaldía de la ciudad de El Alto, el miércoles.
Seis personas murieron y 26 resultaron heridas en el incendio ocurrido en el edificio municipal, en medio de actos de violencia tras una manifestación de juntas escolares para exigir infraestructuras de sus escuelas.
La oposición y el oficialismo han intercambiado acusaciones sobre lo ocurrido.
A raíz de los hechos fue destituido el comandante regional de El Alto. El presidente del Senado informó que se convocó al ministro de Gobierno y a la alcaldesa de El Alto para que presenten un informe oral, el 1 de marzo.
Una jueza dispuso el viernes la detención preventiva en las cárceles de La Paz para cuatro implicados en los hechos, reportó Agencia Boliviana de Información.
El Ministerio Público imputó a los implicados por delitos de homicidio, tentativa de homicidio, asociación delictuosa y afectación a los bienes del estado, que están tipificados en el Código Penal, según ABI.
Lo sucedido en El Alto es un nuevo ejemplo de la tensión entre el oficialismo y la oposición en un contexto político complejo para el gobierno cuando se debe decidir si Evo Morales puede optar o no a la reelección.
Por ahora en Bolivia está prohibido hacer fiestas y consumir alcohol para no afectar la votación del referendum constitucional del domingo.
La misión de observadores de la Unasur exhortó a los bolivianos a ejercer su derecho al voto en libertad y de manera pacífica.