(CNN) – Poco después de que el papa Francisco calificó el plan de Donald Trump para construir un muro en la frontera entre México y Estados Unidos como “no cristiano”, la campaña del precandidato republicano ya estaba listo con una respuesta:
¿No está la Ciudad del Vaticano, el pequeño Estado soberano del Papa, rodeado de muros?
“Increíbles comentarios del papa teniendo en cuenta que la Ciudad del Vaticano está 100% rodeada por enormes muros”, tuiteó Dan Scavino-, el director de redes sociales de la campaña de Trump y asesor de alto rango.
Sin embargo, eso no es del todo cierto, dijeron varios católicos familiarizados con el diseño de la Ciudad del Vaticano.
Sí, el Vaticano tiene muros, y algunos son bastante grandes. Pero cualquiera puede caminar a través del corazón del patio delantero del papa -la Plaza de San Pedro- en casi cualquier momento. Solo los detectores de metales se interponen entre la icónica señal y los millones de turistas que vienen a ver la sede de la Iglesia Católico Romana.
En otras palabras, la Ciudad del Vaticano puede tener muros, pero la puerta está siempre abierta, dijo James Martin, sacerdote católico y editor general de la revista America.
“Las fortificaciones fueron construidas hace mucho tiempo”, dijo Martin. “Este papa no las construyó - y desde luego no las construyó para mantener alejados a los inmigrantes pobres.
Para enfatizar su punto, Martin tuiteó una imagen de la plaza de San Pedro.
El analista de religión en CNN, Edward Beck, también usó las redes sociales para contrarrestar los argumentos de la campaña de Trump. Las muros fueron construidos en el año 800 para proteger al papa, frente a las invasiones bárbaras, dijo Beck.
Durante una rueda de prensa en el avión papal este jueves, el papa Francisco dijo que “una persona que piensa en construir muros, cualquier muro, y no en construir puentes, no es un cristiano”.
Los comentarios del papa tuvieron su respuesta del magnate.
“Ningún líder, especialmente un líder religioso, debe tener el derecho de cuestionar la religión o la fe de otro hombre”, dijo Trump, llamando a las declaraciones del papa “vergonzosas”.