Incapaces de capturarla, los veterinarios tuvieron que dispararle dardos tranquilizantes.

(CNN) – Su afán de libertad fue transmitido en la televisión nacional y se convirtió en una sensación en los medios sociales, pero terminó en tragedia.

Una cebra que se escapó de un club de equitación en Japón llevó a los agentes de policía y veterinarios a una persecución que duró horas en un campo de golf.

Pero incapaces de acorralarla, los veterinarios le dispararon al animal de dos años de edad dardos tranquilizantes. Poco después de eso, la cebra se topó con un estanque, donde encontró un final trágico. La causa de la muerte no está clara, según The Associated Press, pero es probable que se ahogara.

“Los veterinarios le realizaron un masaje cardiaco”, dijo Takahiro Taniguchi, portavoz de la policía, pero no pudieron salvar al animal.

Imágenes en los noticieros mostraron el último viaje del animal y los intentos fallidos de capturarlo, mientras que la palabra japonesa para “cebra” fue tendencia en Twitter.

Japón ya ha tenido otra fuga de animales famosa. En 2012 un pingüino escapó de un acuario de Tokio, y llevó casi tres meses capturarlo.