(CNN Español) – La presidenta suspendida de Brasil, Dilma Rousseff, disolvió su gobierno después de la decisión del Senado de iniciar el juicio político en su contra y suspenderla de su cargo por 180 días.
Según se publicó en el Diario Oficial Rousseff destituyó a todos sus ministros y asesores para enfrentar el juicio político.
El primero en la lista de 28 funcionarios es el expresidente Luiz Inácio Lula da Silva, quien había sido nombrado ministro de la Casa Civil de Brasil.
Tras la decisión del Senado, Rousseff continúa siendo presidenta, pero suspendida por 180 días. Es decir, no fue destituida, pero no podrá ejercer las funciones del cargo. Será el hasta ahora vicepresidente Michel Temer, ocupará el cargo de presidente en funciones, quien lleve a cabo funciones ejecutivas, incluida la posibilidad de formar un nuevo gabinete.
El las próximas horas, el senador Vicentinho Alves notificará a Rousseff de la suspensión, que tendrá que firmar. Se espera que Rousseff esté acompañada por el exmandatario Lula da Silva y dé declaraciones a la prensa y a sus seguidores. Habrá un acto simbólico en el Palacio del Planalto, sede del gobierno brasileño.
Afuera del edificio del Congreso, simpatizantes y detractores de Dilma Rousseff se concentraron para manifestar su rechazo o dar su apoyo al proceso de juicio político mientras el debate avanzaba en el interior.