(CNN) – No es inusual que las personas que están en una tienda impidan robos. Pero lo que hace distinto este intento de robo es lo que pasó con la dueña.
Mira la expresión de Kequi Wang:
Esa es la cara sorprendida de alguien que cae en la cuenta de que el arma que le quitó con valentía al ladrón porque pensaba que era de mentiras es real, muy real.
El incidente ocurrió en Crazy Wings en Norfolk, Virginia, en la noche del domingo. Un hombre entró, apunto el arma a Wang y exigió que abriera la caja registradora.
Pero Wang no se dejó.
Video de la cámara de seguridad cuenta el resto de la historia.
Wang pelea, casi impertérrita, por el arma. La agarra por el cañón y se niega a soltarla. Su esposo Lin sale de la cocina, con un cuchillo en mano, golpeando al ladrón en la espalda.
La pareja luego persigue al hombre sacándolo del restaurante.
Wang le dijo a WAVY, afiliada de CNN, que pensó que era un arma falsa.
Lo que nos trae de regreso a la última imagen. Ella examina la pistola y apunta al suelo. No sabemos qué la motivó a halar el gatillo. Pero lo hizo. Y luego la mirada en su cara cuando el disparo es invaluable.
La policía luego halló al ladrón, con una herida en la espalda.
Fue identificado como Jabri Brown, de 19 años. La policía lo acusó de robo, intento de robo y uso de arma de fuego para cometer un delito. Está recluido en la cárcel de Norfolk y comparecerá ante la corte en julio.
CNN contactó al abogado de Brown, Brett Lucas, quien se negó a dar comentarios.
Aunque Wang dice que le complace que Brown haya sido arrestado, le entristece que sea tan joven.
“Espero que pueda cambiar algo”, agregó Wang. “Espero que no lo haga más”.
Con información de Alison Main de CNN