(CNNMoney) – J.K. Rowling denunció que un sitio web está usando su nombre e imagen para promocionar un taller de escritura que promete éxito de best-sellers.
“Odio este clase de cosas y no me gusta que mi imagen sea usada para venderlas”, escribió Rowling a través de su cuenta de Twitter este jueves. “No desperdicien su dinero, muchachos”, agregó.
La autora de Harry Potter incluyó un enlace al sitio bestsellerevent.com, donde un hombre llamado Darren Stephens promociona un taller de creación literaria con duración de tres días, con costo de 4.997 dólares australianos, llamado ‘Cómo escribir un best-seller y crear tu imperio de 6-7 dígitos’.
El sitio actualmente tiene una “oferta por tiempo limitado” y ofrece el curso por 97 dólares australianos.
El sitio web de Stephens muestra imágenes de varias celebridades, incluyendo al candidato republicano a la presidencia de Estados Unidos Donald Trump, al exmandatario estadounidense Bill Clinton y al fundador de Virgin, Richard Branson, como ejemplos de que ese nivel de éxito puede conseguirse si se va al taller.
El sitio dice que el taller está programado para el 26, 27 y 28 de agosto en el Rendezvous Grand Hotel en Melbourne, Australia.
CNNMoney contactó al hotel y consiguió la dirección de correo electrónico del organizador de la conferencia, pero no recibió respuesta de su parte.
El sitio web asegura que Stephens es un CEO, pero no dice de qué compañía. Además, asegura que es un escrito de best-sellers, pero no da el nombre de sus libros.
Es fácil comprender por qué se incluyó a Rowling en la lista de autores exitosos. El camino de esta británica para convertirse en multimillonaria gracias a su serie de libros Harry Potter es un relato sobre dar un salto de la pobreza a la riqueza.
La autora era madre soltera en Edimburgo, Escocia, cuando escribió su primer libro Harry Potter y la piedra filosofal, en 1999. Luego de eso, escribió seis más.
La serie atrajo a muchos seguidores, lo que ayudó a que se convirtiera en una famosa serie de películas y posteriormente tuviera atracciones en los parques de diversiones de Universal Studios en Florida y California, en Estados Unidos.