HONG KONG (CNN) – Los fanáticos de Apple hicieron fila en toda China la semana pasada para tener en sus manos el último iPhone, mientras que otros intentaron pasarlo de contrabando desde Hong Kong.
Pero un usuario no tuvo que preocuparse: Coco, un Malamute de Alaska.
El dueño de Coco, Wang Sicong, hijo del multimillonario chino Wang Jianlin (de una fortuna estimada de 30.000 millones de dólares), compró los ocho iPhone 7s el día que estuvieron disponibles al público, de acuerdo con las fotos publicadas en la cuenta verificada del perro en la red social Weibo.
“No entiendo todas las publicaciones presuntuosas (en redes sociales)”, se lee junto a las fotos. “¿Cuál es el punto? ¿Que no lo hiciera?”.
En China, un iPhone 7 cuesta unos 1.047 dólares, mientras que el iPhone 7 Plus cuesta 1.197 dólares.
‘Esposo de la nación’
No es la primera vez que Wang utiliza a su mascota de esta forma.
En 2015, él causó estupor en China luego de que publicó fotos del perro con dos relojes de Apple que tenían correas de lujo que valían más de 37.000 dólares.
Él es parte de la segunda generación de ricos, los hijos o hijas de multimillonarios que son mayormente conocidos por presumir sus estilos de vida.
Conocido como “el esposo de la nación” por ser el soltero más codiciado de China, Wang ha sido criticado por la prensa estatal debido a la forma en que demuestra su riqueza.
El año pasado, la agencia estatal Xinhua publicó un comentario sobre Wang, a quien acusó de haber “manchado la pureza de los chinos” y advirtió a otros no copiar a la “arrogante y grosera celebridad”.
Esto ocurrió luego de que Wang causara controversia al decir que lo único que buscaba en una potencial novia era el tamaño de sus senos, lo que causó que Xinhua lo acusara de tener una “arrogancia al estilo de Berlusconi”.
Las críticas fueron tan fuertes que su padre tuvo que aparecer en la televisión estatal para abordar la controversia, la cual dijo fue causada por la “educación occidental” de su hijo.
Serenitie Wang en Beijing contribuyó con este reporte.