"Michael Moore in TrumpLand" se estrenó el martes en el IFC Center en Nueva York.

(CNN) – Presentando su nuevo documental como la ‘sorpresa de octubre’ (un término político para un giro usual que se espera a semanas de las elecciones), el polémico cineasta Michael Moore busca influenciar otra campaña presidencial a través de la pantalla grande.

Moore, ganador de premios por documentales como “Bowling for Columbine” y “Fahrenheit 9/11”, ha inspirado a los liberales y encolerizado a los conservadores al presentar su más reciente trabajo “Michael Moore in TrumpLand”, una puesta en escena de un solo hombre protagonizada por el mismo director en la que se refiere a la elección presidencial de 2016.

El documental fue grabado durante dos noches a principios de este mes en Wilmington, Ohio, luego de que los planes de un show en vivo de Moore en otro lugar del estado se desecharan.

Moore dijo en Facebook el mes pasado que la junta comunitaria que supervisaba el Midland Theater en Newark, en Ohio, no le permitió actuar allí por preocupaciones de que podría influir en la elección presidencial.

Eso no está en discusión.

“TrumpLand” es un desvergonzado esfuerzo para hacer que Hillary Clinton sea elegida e impedir que Trump llegue a la presidencia, tal como hizo Moore en 2004 con “Fahrenheit 9/11”, que tuvo como propósito derrotar a George W. Bush.

“La fila empezó desde hace unas horas y ahora está doblando la cuadra. Wow. Gracias a todos. #TrumpLand #OctoberSurprise”, escribió Moore en Twitter.

Moore ofreció una muestra con ‘snacks’ gratis en el IFC Center en Nueva York, donde la película empezó a exhibirse este miércoles. A pesar del afanado estreno, la película no fue del todo inesperada, pues Moore la había promocionado desde hacía unos días en Twitter.

“Sí, algunos rumores pueden ser ciertos”, escribió Moore el fin de semana. “Quizás esté arreglando los toques finales de una ‘Sorpresa de octubre’ para esta elección. Aunque pensándolo bien…”

El inusual estreno es adecuado para lo que parece ser una película inusual de Moore.

En una reseña publicada por el New York Times este miércoles, el crítico Neil Genzlinger escribió que en “TrumpLand” Moore “parece estar decididamente desinteresado en provocar a cualquier persona con esta nueva oferta”.

Genzlinger describió la actuación de Moore como una “rutina de stand-up comedy” que a veces “suena como un discurso de graduación”.

La película, escribió Genzlinger “no es un ataque contra Trump, sino un himno a su oponente presidencial, Hillary Clinton”.

Moore se ha pronunciado contra la candidatura presidencial de Donald Trump durante toda la campaña, pero el director de cine ganador del Oscar no ha sido un partidario acérrimo de Clinton en los últimos años.

En 2008, Moore dijo que tenía una “prohibición moral” para votar por Clinton debido a que en el pasado apoyó la guerra en Iraq. Durante las primarias del Partido Demócrata apoyó a Bernie Sanders.

Pero Moore dijo en mayo que podría apoyar “absolutamente” a Clinton si fuera la nominada. Y durante el primer debate presidencial del mes pasado, Moore les hizo una petición a los candidatos de Sanders.

“Queridos partidarios de Bernie, no hay nada de lo que ella está diciendo con lo que no estemos de acuerdo”, tuiteó Moore. “De hecho, ella está adoptando sus posiciones”.