(CNN) – No hay mejor forma de poner a prueba el sistema inmune de tu cuerpo que someterlo a un vuelo.
En esos espacios encerrados, aire recirculado y gente abarrotada, los aeropuertos y aviones son los principales caldos de cultivo de bacterias.
Pero ¿qué superficies son las más sucias?
El sitio web Travelmath.com envió a un microbiólogo para que tomara 26 muestras de cinco aeropuertos estadounidenses y de cuatro vuelos de dos grandes aerolíneas, aunque no especificaron cuáles.
Según los resultados de laboratorio, la mesa plegable es el lugar más sucio de todas las superficies que analizaron.
Las mesas tienen un promedio de 2.155 unidades formadoras de colonias (UFC) por cada pulgada cuadrada.
“Debido a que esto podría causar una transmisión directa de bacterias a tu boca, una conclusión clara es que hay que eliminar cualquier contacto directo de tu comida con la mesa”, dice el informe de Travelmath con los hallazgos.
En segundo lugar están los botones para las fuentes de agua, seguidos por las rejillas de aire ubicadas sobre las sillas.
La lista
Esta es la lista completa de los lugares y superficies más sucios en aviones y aeropuertos:
1) Mesa plegable: 2.155 UFC por pulgada cuadrada
2) Botones de las fuentes de agua: 1.240 UFC por pulgada cuadrada
3) Rejillas de ventilación: 285 UFC por pulgada cuadrada
4) Botones de vaciado en los baños: 265 UFC por pulgada cuadrada
5) Hebillas del cinturón de seguridad: 230 UFC por pulgada cuadrada
6) Las cerraduras de puerta del baño: 70 UFC por pulgada cuadrada
¿Por qué las mesitas son los lugares más sucios? Travelmath dijo que tendría que ver con que el personal de la aerolínea tiene poco tiempo entre vuelos para limpiar adecuadamente los asientos.
Los baños, de otra parte, son limpiados con más frecuencia.
Antes de que canceles tu próximo vuelo, ten en cuenta que hay algo positivo para estos sucios hallazgos.
Aunque el estudio no especificó qué tipos de bacterias fueron encontradas, Travelmath dijo que las 26 muestras de aeropuertos y aviones salieron negativas en cuanto a presencia de coliformes fecales como E. coli, que pueden ser potencialmente infecciosas.