(CNN) – Estás en el túnel, 87 años de una compleja rivalidad deportiva y política a tus espaldas, un partido que hay que ganar. Bienvenido a El Clásico.
“Recuerdo mi primera vez en el Camp Nou”, cuenta a CNN el exjugador del Real Madrid, previo a que los dos grandes rivales de la Liga española se enfrenten en Barcelona este sábado.
“Cuando salimos al campo, los silbidos, el ruido de los silbidos era increíble. Tanta gente, 100 mil personas silbando. Era como música para nosotros. Un coliseo”, dice Alonso, en referencia al anfiteatro romano que alguna vez fue escenario de espectaculares batallas entre gladiadores.
Y luego pierdes.
Ese día de 2009, Alonso y sus compañeros de equipo fueron incapaces de calmar la hostilidad de la grada en Barcelona, cayendo por marcador de 1-0 gracias a una volea de Zlatan Ibrahimovic.
Alonso se fue al Bayern Munich en el verano de 2014, pero el jugador español recuerda con afecto los cinco años que pasó en Madrid, donde ganó su primera Liga y ayudó al club a obtener la décima Copa de Campeones de Europa, o Champions League, luego de vencer a sus rivales de ciudad, el Atlético de Madrid, en Lisboa.
Ahora, a sus 35 años, Alonso admite que sigue con atención los esfuerzos de sus excompañeros.
“Tengo un ojo puesto en todos mis clubs: Real Sociedad, Liverpool y Real Madrid”, dijo.
“Por supuesto, El Clásico especialmente… La proyección que tiene en todo el mundo es increíble, y si juegas para el Real Madrid en el Camp Nou, ¡sabes que no tendrás una de las bienvenidas más cálidas!”.
El holandés volador
Otro jugador del Bayern Munich que conoce la infame hostilidad de El Clásico es el exdelantero del Real Madrid Arjen Robben.
Aunque tuvo poco más de 50 apariciones con los blancos, el internacional holandés de 32 años ha experimentado, más que cualquier otro, las altas y las bajas del partido más duro de España.
“Esto empieza mucho antes del inicio del partido”, dice el holandés a CNN, aludiendo a la intensa cobertura de medios sobre el encuentro.
“Tengo algunos buenos recuerdos (de El Clásico), y también algunos no tan buenos de cuando perdimos”.
Especialmente cuando Robben estuvo del lado perdedor en la goleada 6-2 a su equipo en su estadio, el Santiago Bernabéu, durante su última temporada en el club, poco antes de que las cosas se tornaran amargas y él se fuera al Bayern.
No es de sorprender que Robben prefiera recordar los buenos tiempos, como cuando añadió su medalla de La Liga a su gabinete de trofeos durante su primera temporada en Madrid.
Entonces, después de asegurar el título a tres juegos del final de la temporada, los jugadores del Barcelona hicieron el “pasillo” a Robben y sus compañeros en Camp Nou.
“Mi mejor recuerdo es de cuando ganamos la liga española, y el primer partido después de ganarlo fue contra el Barcelona”, contó.
“Tuvieron que hacer el pasillo para que nosotros pasáramos”.
El Real Madrid ganaron ese partido 4-1, la mayor victoria del club en liga contra el Barcelona desde que Iván Zamorano guiara a los blancos en su victoria de 5-0 en 1995.
Robben los ayudó con un excelente remate de cabeza y el holandés sonríe al recordar la preparación del equipo para ese famoso triunfo, habiendo sellado el campeonato una semana antes contra el Osasuna.
“Después (de ganar el título) estuvimos de fiesta durante 3 días, pero aun así ganamos el juego 4-1… Creo que es mi mejor recuerdo de El Clásico”.
¿Messi o Ronaldo?
Si los dos equipos son de clase mundial, muchos dicen que Lionel Messi, del Barcelona, y Cristiano Ronaldo, del Real Madrid, son de otro planeta.
“Creo que es extraordinario lo que hemos visto en los últimos años de estos dos chicos”, dijo Alonso a CNN.
“Es justo decir que están por encima de cualquier otro jugador. Solo en números, es increíble lo que están haciendo.
“Son distintos: Cristiano es tan ambicioso y el gol está en su cabeza. Ha sido capaz de adaptarse, pues ya no es el mismo jugador de hace ocho años en el Manchester United.
“Ahora él está en el área y, cuando tiene el balón, es gol, ya sea con la cabeza o con el pie.
“Y he jugado contra Messi muchas veces y es muy complicado detenerlo. En cualquier posición es muy peligroso.
“Cada uno de ellos tiene sus propias cualidades, pero los dos son increíbles.
“Por su brillante juego, verlos jugar cada semana es un placer verlos”.