(CNN Español) – Blanca Stalling, magistrada de la Corte Suprema de Justicia de Guatemala capturada este miércoles, fue acusada formalmente de tráfico de influencias, según señaló el Ministerio Público (MP) del país centroamericano.
La vocera del MP le indicó a CNN en Español que Stalling, magistrada vocal VII de la Corte, intentaba ocultar su identidad en el momento en el que fue encontrada por las autoridades en la Zona 9 de la capital guatemalteca.
A solicitud del mismo ente, Stalling fue enviada a prisión preventiva. El juez encargado del caso, Adrián Rodríguez, otorgó un plazo de tres meses para poder así concluir con la investigación.
Conforme a la acusación hecha por el Ministerio Público, y según el Artículo 449 bis del Código Penal guatemalteco, Stalling podría ser castigada “con prisión de dos a seis años e inhabilitación especial”.
El pasado 11 de enero, el ente fiscal y la Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala (CICIG) habían acusado a Stalling y a Eddy Giovanni Orellana Donis, presidente de la Sala Segunda Civil y Mercantil del Organismo Judicial, por “posibles irregularidades dentro de sus funciones”.
El caso exacto por el que se acusa a Stalling es la pretensión de influir en la decisión de un tribunal para beneficiar a su hijo, Otto Fernando Molina Stalling, capturado en mayo del 2015, en un contrato por 116 millones de quetzales (15.595.590 dólares al cambio de este jueves) con la Droguería Pisa para “proporcionar servicios de diálisis peritoneal” en una licitación hecha por el Instituto Guatemalteco de Seguridad Social.