(CNN) – Por primera vez, el primer ministro de Malasia, Najib Razak, ha acusado directamente a Corea del Norte de asesinar a Kim Jong-nam.
“Lo que enfrentamos ahora es el resultado de sus acciones en el asesinato de su propio ciudadano en Malasia, en suelo de Malasia, usando un arma química estrictamente prohibida”, dijo Najib a la agencia de prensa estatal Bernama este miércoles.
Su declaración llega en medio de la profundización del conflicto diplomático tras el asesinato del medio hermano del líder de Corea del Norte, Kim Jong-un, en el Aeropuerto Internacional de Kuala Lumpur el pasado mes de febrero.
Un funcionario de prensa de Najib confirmó los comentarios a CNN. Corea del Norte ha negado reiteradamente cualquier implicación en el asesinato de Kim Jong-nam.
Kim murió el 13 de febrero, menos de 20 minutos después de que dos mujeres le llenaron la cara del altamente tóxico agente nervioso VX, de acuerdo con la policía de Malasia.
La consiguiente investigación sobre el asesinato de Kim ha dañado gravemente las relaciones diplomáticas entre los dos países.
El martes, Corea del Norte prohibió a los ciudadanos malasios salir del país. Malasia respondió con la misma medida.
Los comentarios de Najib podrían complicar los esfuerzos para el retorno seguro de los 11 nacionales de Malasia en Corea del Norte. Entre ellos hay cuatro miembros del personal de la embajada, junto con sus familiares, y dos empleados de la ONU.
Mientras tanto, Malasia cree tres personas buscadas para ser interrogadas en relación con el asesinato de Kim están en la embajada de Corea del Norte en Kuala Lumpur.
La policía dice que Corea del Norte no está respondiendo a su solicitud para interrogarlos.
Sólo dos personas, una mujer de Vietnam y otra de Indonesia, han sido acusadas formalmente por el asesinato de Kim.
Un tercer sospechoso de Corea del Norte que estuvo bajo custodia fue liberado después, cuando los investigadores determinaron que no había pruebas suficientes para acusarlo. Posteriormente, fue deportado a Corea del Norte.
Malasia está buscando a otros cuatro sospechosos en relación con el asesinato, todos hombres de Corea del Norte.