(CNN) – Es una tragedia indescriptible que ocurrió en uno de los lugares más mundanos: el vestidor de una tienda de ropa de segunda mano.
El fin de semana pasado, el pequeño Ryu Pena, de cuatro años, se encontraba en el almacén Again Thrift and More en Mankato, Minnesota, cuando accidentalmente se ahorcó en la habitación de vestuario de la tienda.
La Policía explicó que Ryu se le escabulló a su abuela, que estaba de compras en el establecimiento, y entró a un probador vacío. Aparentemente, el niño cerró la puerta, se subió al banco que estaba adentro y el saco con capota que estaba usando se enredó con el gancho del vestier.
“Creemos que quedó atrapado en el gancho para chaquetas dentro del área de vestuario y no pudo liberarse a sí mismo”, le explicó el comandante Jeremy Clifton, de la Seguridad Pública de Mankato a la afiliada de CNN, WCCO.
Los pequeños pies de Ryu no alcanzaban el suelo, así que quedó colgando allí y se asfixió, mientras su abuela y otros lo buscaban con desespero. Cuando lo encontraron era muy tarde.
La mamá del pequeño, Denise González, dijo que Ryu perdió su vida cuando simplemente jugaba.
“Es la única manera en la que lo puedo describir. Estaba jugando porque es muy curioso, aventurero y todo pasó muy rápido”, le aseguró a WCCO.
González también manifestó que siempre recordará a su hijo siendo muy activo, como un niño que amaba saltar en los sofás y dar botes.
“Era tan temerario”, apuntó.
La familia de Ryu creó una página de GoFundMe con la intención de ayudar a recaudar fondos para su funeral.