(CNN Español) – El Congreso Nacional de Honduras avanza en la discusión del nuevo código penal del país en el que se han adelantado polémicas discusiones que abarcan gran cantidad de temas, entre ellos la discusión sobre la despenalización del aborto y más recientemente, la bigamia.
Este jueves, el legislativo nacional aprobó el Capítulo II que se refiere a los delitos contra las relaciones familiares. En este se estableció una pena de prisión de hasta tres años para quienes incurran en la bigamia o los matrimonios ilegales, así como la celebración de matrimonios inválidos, según informa la página web del Congreso.
Actualmente la bigamia es castigada con penas de entre dos a cinco años, pero la sanción era conmutable y se podía evitar ir a prisión, dice la página del Congreso Nacional.
Según el código penal vigente en Honduras es ilegal contraer un segundo matrimonio sin haber celebrado un divorcio previamente. La pena se le impone tanto al bígamo como a la persona soltera, que a sabiendas de la situación de su pareja acceda a casarse con ella.
Además, los funcionarios que autoricen matrimonios ilegales se enfrentan a pagar multas de entre 2.000 y 4.000 dólares y a una inhabilidad de entre 4 a 6 años, según lo establece el artículo 173 del código .
Pero con la aprobación de la nueva legislación, la pena quedó establecido entre uno y tres años sin posibilidad de conmutar, “es decir que deberá cumplir la pena en la cárcel”, dice la página web del Congreso.
Sin consenso sobre el aborto
La comisión de diputados que analiza el dictamen sobre el aborto citó para este miércoles a diferentes grupos de la sociedad civil que se pronunciaran a favor y en contra del aborto terapéutico.
Como no se llegó a un consenso sobre este tema, la discusión del que sería el nuevo artículo 696 del código penal aún sigue aplazada.
Para que se apruebe el aborto terapéutico se necesitan 65 votos a favor de los 128 diputados del Congreso Nacional.
Quienes están a favor de la despenalización dicen que el aborto debe ser justificado por tres causales: cuando el embarazo es producto de una violación sexual o incesto, cuando pone en grave riesgo la salud y la vida de la mujer embarazada; y cuando existen malformaciones congénitas incompatibles con la vida.
Grupos conservadores, entre ellos la iglesia y organizaciones que defienden la vida, se oponen a cualquier iniciativa que busque despenalizar el aborto.
Actualmente en Honduras es delito el aborto y se castiga con penas de entre tres y 10 años de cárcel.
Otros decretos que fueron aprobados en esta discusión fueron los delitos contra “la trata de personas y formas degradantes de explotación humana”, entre los que aparece la prohibición de la “inseminación artificial y otras técnicas de reproducción asistida no consentidas”.
Aún queda un largo camino en la discusión del nuevo Código Penal de ese país que será implementado en 2018 cuando sea publicado en la Gaceta Oficial, según la prensa local.